En un movimiento sin dudas sorpresivo, las Chivas de Guadalajara están muy cerca de repatriar a Alan Pulido, delantero que supo tener un gran paso por la institución. El atacante ya realizó la primera parte de las pruebas médicas y tiene casi todo acordado para convertirse en el segundo refuerzo del Rebaño para el Clausura 2025.
En su gran mayoría, la afición rojiblanca ve con buenos ojos el regreso de Puligol, aunque también es cierto que su edad genera cierto debate y especulaciones. Es un hecho que el fichaje de Pulido también supondrá un gran desafío para otros elementos de la plantilla, principalmente para los más jóvenes.
Hormiga y Wilke podrían ser los más perjudicados con el regreso de Pulido
Armando González y Teun Wilke son dos centrodelanteros jóvenes que aún buscan consolidarse en Chivas. Y cuando parecía que el Rebaño daba un voto de confianza a su cantera, se da el fichaje de Pulido, un futbolista con más experiencia y que ya tiene su peso propio dentro de la institución.
El regreso de Pulido parece poner en entredicho las oportunidades de Armando González y Wilke en el primer equipo. Aunque la Hormiga se dispone a competir con Pulido, Chicharito y Marín, está claro que el reparto de minutos será más equilibrado, justo cuando parecía que el joven de 21 años podía imponerse como titular.
Por otro lado, Teun Wilke también enfrenta una situación difícil. El delantero que viene de ser goleador con el Tapatío en la Liga Expansión había hecho la pretemporada con el primer equipo, pero la sobrepoblación de delanteros motivó su regreso al Filial. Este nuevo fichaje promete hacerle aún más difícil su consolidación en el primer equipo.
Benjamín Sánchez, otro elemento perjudicado
Además, otro jugador que se encuentra en una situación delicada es Benjamín Sánchez. El delantero, quien renovó su contrato confiado en que recibiría oportunidades con el primer equipo, sólo fue tenido en cuenta por Óscar García en el amistoso ante Mineros. A pesar de haber sumado algunos minutos en este encuentro, luego no fue considerado y ahora tendrá aún más competencia, quedando a la espera de una oportunidad que quizás no termine llegando.