Chivas practicó remates desde los doce pasos a menos de una semana de la Liguilla.
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El que se quema con leche ve una vaca y llora… Esa frase utilizada en buena parte del continente parece ser cabecera para Matías Almeyda, quien dispuso una tanda especial de penales depués del entrenamiento habitual de este jueves en Verde Valle. Luego de aquella definición a favor con suspenso en el Azteca y del sinsabor en la Corregidora en la Final de la Copa, el entrenador no quiere que se repitan este tipo de sucesos.
Otra vez falló el Gullit.
Durante la práctica a puertas cerradas uno de los que falló, de nuevo, fue Carlos Peña, quien parece tener una maldición con los remates desde los once metros. En lo que va del semestre el Rebaño ya ha errado cinco penales decisivos tanto en la Liga como en la Copa. Y el Cuerpo Técnico rojiblanco busca pulir esta cuestión, que puede volver a ser determinante en la Fiesta Grande.
