Benjamín Galindo fue uno de los futbolistas más talentosos que ha brindado el futbol mexicano en toda su historia, en donde su principal característica era el golpeo de balón con el que se convirtió en ídolo en todos los clubes en los que participó, dejando una huella imborrable en Chivas

El Maestro recordó que una de las claves para tener éxito en su carrera como jugador profesional fue “la repetición”, lo que fue clave para mejorar su manera de impactar la redonda y marcar decenas de goles memorables; sin embargo, Manuel Sol, exjugador del Guadalajara, recordó que usaba esas cualidades para ganarse un dinero extra.  

“La repetición. Tuve las dos piernas con las que pateaba igual, ese don me lo dio Dios, pero lo traté de pulir al máximo. Después de los entrenamientos me quedaba y pateaba de 100 a 200 tiros y eso me ayudó mucho a triunfar en mi carrera”, recordó Galindo en su podcast, El toque Maestro. 

“A triunfar y a meterse lana porque nos quedábamos al final de los entrenamientos y nos decía: ‘tiros libres’. Jugábamos varios y poníamos una lana. El teacher siempre salía con las bolsas llenas”, recordó entre risas Manuel Sol. 

Benjamín Galindo le ganó 80 mil pesos a Julio González 

“Fue en Santos, cuando era auxiliar del Chepo de la Torre. Mi equipo era Carlos Acevedo, el portero y jugaba contra Julio González y el sobrino del Chepo. Hubo una vez que me dice Julio: ‘doble o nada’. Le dije: ‘ya no juegues, Julio. Vas a perder’. Era más picado que yo y le gané ese día 80 mil pesos. 

“Cuando me da el dinero y le doy la mitad a Carlos Acevedo, le digo: ‘acuérdate siempre que te ayudé para tu universidad’. Y no se le olvida”, recordó Benjamín Galindo entre risas.