En los últimos meses, aficionados rivales han señalado a las Chivas como un equipo que sofoca y desaprovecha a sus talentos. Ya sea por la presión que genera jugar en el equipo más popular de México o el constante ruido mediático, varias veces se ha repetido que los futbolistas que llegan al Rebaño Sagrado se estancan o cometen un error al llegar a la institución.
Más precisamente, en este Apertura 2024 hubo que escuchar que futbolistas como Alexis Vega, César Huerta o Uriel Antuna, entre otros, ahora sí estaban en su mejor versión gracias a que habían salido del Rebaño Sagrado. Sin embargo, los resultados de esta última Liguilla dejan en claro que sus rendimientos van más allá de lo que suceda en el entorno rojiblanco.
Estos ejemplos demuestran que jugar en Chivas puede ser un desafío especial, pero no siempre puede ser considerado como el culpable de que los jugadores no brillen. Alexis Vega, César Huerta y Uriel Antuna han tenido la oportunidad de demostrar en contextos diferentes y sus actuaciones en Liguilla desmienten aquello de que es el Rebaño y su entorno lo que no les permite brillar.
El caso de Alexis Vega: luces y sombras en Toluca
Desde su salida del Rebaño, es cierto que Vega pudo recuperar nivel. Sin embargo, muchos olvidan que en Chivas también tuvo sus momentos de buen rendimiento. Lo cierto es que los aficionados rivales se aferraban a este caso para demostrar que el conjunto tapatío no les permitía encontrar su mejor versión. Aunque tuvo una buena fase regular, Vega no gravitó en ninguno de los dos juegos contra el América por los cuartos de final, tal y como se le reclamaba durante su etapa en Verde Valle.
César Huerta y Pumas: Una promesa que no termina de despegar
El “Chino” Huerta tuvo un importante crecimiento desde que dejó Chivas, puesto que no tuvo demasiadas oportunidades y en Pumas se le dio un rol muy importante. Sin embargo, una vez más en la Liguilla su influencia se diluyó. Frente a Monterrey, el extremo mexicano no logró mantener su impacto y apenas aportó una asistencia cuando la eliminatoria estaba definida. Quiere decir que quizás tampoco hubiese sido un elemento capaz de cambiar la ecuación en el Rebaño.
Uriel Antuna: velocidad sin trascendencia
El Brujo fue otro de los que intentó despegar fuera de Chivas y a decir verdad, tuvo su crecimiento en Cruz Azul, donde mejoró sus cifras. Sin embargo, lejos de La Noria y ya como refuerzo de Tigres UANL, la participación de Uriel Antuna fue intrascendente: apenas aportó una asistencia en la fase regular y no apareció en la Liguilla, donde su equipo cayó a manos de San Luis. ¿Será que su mejora fue pura y exclusivamente por el buen trabajo de Martín Anselmi en La Noria?