Víctor Guzmán, mediocampista fichado por las Chivas de Guadalajara y que debió regresaral club Pachuca en este mercado de transferencias por un escándalo de dopaje, se mantiene a la espera de esclarecer su caso de una prueba positiva y que lo inhabilitó de jugar en este Torneo Clausura 2020 de la Liga MX.
El volante tapatío, de 25 años de edad, sigue esperando que se resuelva su caso y en Pachuca no quieren que pierda ritmo y que se mantenga al menos físicamente, por lo que desde finales de enero le asignaron a un preparador físico particularpara que trabaje con todos los días.
El “Pocho” Guzmán, al no poder entrenar con el plantel de los Tuzos ni en ninguna de las instalaciones de la institución, el volante tiene que usar una sede alterna para poder trabajar y no perder todo el trabajo físico que hizo durante la pretemporada con Chivas.
El volante formado en la cantera rojiblanca también está siendo asesorado por un grupo de abogados del club hidalguense, que confía en que su caso por dopaje se resuelva a su favor tras la muestra de la prueba B y vuelva a las canchas con el equipo de la Bella Airosa o se concrete de nuevo su traspaso al Club Deportivo Guadalajara.
El Rebaño Sagrado, que viene de caer goleado el sábado 3-0 ante Tigres UANL en el Estadio Universitario por la pasada fecha del campeonato, se prepara desde este lunes en la ciudad deportiva de Verde Valle y con la única ausencia confirmada en el plantel de Jesús Sánchez por lesión, para recibir este sábado a Cruz Azul.