Fue campeón con Chivas, los festejos de sus goles eran icónicos y hoy cumple años

Gustavo Nápoles cerró la pinza y anotó el primero de los cuatro goles que marcó el 1 de junio de 1997 en la Gran Final del futbol mexicano entre Chivas y Toros Neza. El delantero del Guadalajara celebró como gusano, un icónico festejo que se volvió de culto en los años 90 y que le hizo acreedor al apodo que lo ampararía a lo largo de su carrera como futbolista profesional.

Gusano Nápoles nació un día como hoy 11 de mayo pero de 1973 en San Nicolas de los Garza, Nuevo León. Con Chivas marcó 39 goles en 143 partidos y fue una pieza fundamental del Rebaño Sagrado para llevarse el último campeonato rojiblanco antes de que Jorge Vergara adquiriera al cuadro tapatío. 

Gusano Nápoles se volvió un trotamundos, pero nunca le fue como en Chivas

Pasó por Atlante, luego jugó con América y volvió a Chivas sin éxito, por lo que en el 2002, salió al cuadro de los Jaguares de Chiapas, para después pasar al León, para finalmente, terminar su carrera profesional con el Puebla hace dos décadas atrás, en el ya lejano Clausura 2004.

Pero Nápoles se arrepintió de su retiro y probó suerte en el fútbol ecuatoriano con el cuadro Espoli, donde solo jugó seis meses. Un año después, en 2007 volvió a México y se enroló con el conjunto de los Tigres de Los Mochis, equipo filial de los Tigres. 

Gusano dio de qué hablar por temas extracancha en Chiapas. Según el exfutbolista argentino, Luciano Ángel de Bruno, reveló que durante su estancia en Jaguares durante 2003, descubrió que en la hielera del equipo había cerveza durante las prácticas y que era una práctica usual del Gusano.

La historia de Gusano y las cervezas en el entrenamiento

“Fue en la primera práctica, había una hielera de Gatorade, lleno de hielo y todo, metí la mano y saqué una Corona , como en todos los equipos que había dos o tres que se hacían los pistola. Recuerdo uno que era Gustavo Nápoles, hacía los goles y hacía un gusano, por eso le decían Gusano Nápoles , se hacía el vivo, el canchero y traía cerveza , y la guardaba ahí abajo, yo le saqué una cerveza y me la tomé”, dijo en una entrevista que se difundió en la cuenta @MXSudamericana.

Sin duda, Nápoles es una de las leyendas que se ganó el cariño de la afición chiva gracias —especialmente— a esos cuatro goles en la Final de Vuelta del Verano 97 ante Toros Neza. Feliz cumpleaños, Gusano.