Las Chivas de Guadalajara han puesto mucho énfasis en la captación de talento joven para terminar de formar jugadores en su propia cantera y así no tener que pagar millonadas en cada mercado. Muchas de esas promesas llegaron desde el mercado estadounidense, con jugadores de doble nacionalidad que son elegibles para jugar con el Rebaño.
Ahí están los casos de Leonardo Sepúlveda, Daniel Flores, Brandon Téllez, Christian Torres, Leo Torres, Adrián Pelayo y Diego Rosales, entre otros; todos ellos cuentan con nacionalidad mexicana y llegaron desde Estados Unidos. Sin embargo, no todos los mexicoamericanos han logrado ganarse su sitio en una cantera tan competitiva como la del Rebaño Sagrado.
Javen Romero y Antonio Herrera se marcharon del Guadalajara
Otras dos jovenes promesas no tuvieron demasiado éxito en las filas rojiblancas. Se trata de Javen Romero y Antonio Herrera, quienes se marcharon luego de seis meses a préstamo con el Rebaño, en donde no lograron convencer para quedarse de manera definitiva en las Fuerzas Básicas rojiblancas.
Romero, marcador central zurdo de 18 años, sumó minutos en las filas del Sub-23. Demostró tener condiciones técnicas, pero una lesión interrumpió su progreso y no volvió a tener protagonismo. Por su parte, Herrera no pudo hacerse sitio con el Sub-19 de Sergio Pinto y al cumplir 20 años en enero, no iba a tener lugar en la plantilla del Sub-23.
Javen Romero llegaba desde la academia de Los Ángeles FC y con recorrido en la Selección Mexicana Sub-17, donde fue mundialista. Según Transfermarkt, actualmente se encuentra sin equipo. Por su parte, Antonio Herrera, quien también jugó con el Tri en selecciones juveniles, regresó al Tacoma Defience de la MLS Next Pro.