La futbolista mexicana, ex de las Chivas de Guadalajara,Rubí Soto, reveló que el futbol femenil se disfruta más porque los jugadores siempre buscan la manera de quejarse por todo, con el simple hecho de estar mucho tiempo tirados por alguna falta que se comete durante los partidos.

En entrevista para ESPN, la ahora delantera del Villarreal de España, explicó las razones por las que el balompié de mujeres tiene una perspectiva diferente, pues se juega con mayor tiempo efectivo: “Los partidos de mujeres los disfrutamos un poquito más porque no somos como los hombres que lloran, o que se tiran por todo”.

Por otro lado, la goleadora histórica de Chivas, quien por el momento se encuentra en el tercer lugar con 20 goles por debajo de Norma Palafox y Alicia Cervantes, respondió a las críticas del ex entrenador del Rebaño Sagrado, Hans Westerhof, quien dijo que a los jugadores mexicanos no le gusta entrenar con intensidad, aunque después aclaró que sólo se refería al futbolista que juega en México.

“No es que al mexicano no le guste trabajar, porque en los entrenamientos sí corres, sí es intenso y todo, pero aquí es mucho más técnico junto con mucha más intensidad, se conjugan todas esas cosas y se hace más difícil, como está super intenso, a veces, con la técnica sufres un poquito porque de lo miso intenso no te alcanzas a frenar. Pero él (Hans Westerhoff) sí estaba equivocado en ese aspecto hay muchos mexicanos que han estado aquí y han triunfando, todavía hay muchos mexicanos por aquí y les ha ido muy bien”, explicó Rubí Soto.

Las dificultades que ha enfrentando Rubí Soto en Villarreal  

Por otra parte, Soto reveló parte de las situaciones complicadas que ha vivido en su salto al futbol europeo a partir del verano del 2020, donde argumentó que no ha podido llevar a su familia a España porque vive en una depetarmento con otras jugadores del Submarino Amarillo, además de que antes de enrolarse con el club ibérico sufrió un terrible pérdida.

“Antes de venir aquí yo pasé una situación muy didil porque perdí a mi mamá en junio, con mis papás es con los que más estaba en comunicación. No ha sido tan difícil estar lejos porque desde los 16 años salí de mi casa, jugaba en Chivas. Hay días en que ya quisiera retirarme del futbol, y ser una niña de casa, estar más con mi familia, con mi papá porque tengo muchísimo tiempo que no paso con ellos, cero convivo con mi familia, pero todo sacrificio va a tener us recompensa. Y esta fue la recompensa de que saliera de México para jugar en España, pero hay días en que sí me siento muy triste o no le digo a mi papá para que no se sienta incomodo o se ponga triste. Muchas veces mi papá no tiene respuesta a lo que yo le digo. Es más difícil para una mujer, porque la mujer está más apegada a la familia que los hombres, los hombres se pueden traer a la familia y yo no, vivo en un departamento compartido con dos compañeras y no puedo traerme a la familia porque al femenil no le pagan si estas casada o así, eso ya va por tu cuenta. Son muchas diferencias en ese aspecto, los hombre están muy felices con su familia y todo, pero una no”, apuntó Rubí.