El juego de ida de los Octavos de la Copa MX fue decepcionante no sólo por el resultado, sino también por el nivel del equipo. Al haber invertido más que ningún otro equipo en México, a Chivas se le exigirá ir por todos los títulos y las críticas no tardaron en llegar luego de la derrota ante Dorados. Sin embargo, lejos está el club de Guadalajara de rendirse en la Copa MX: el gol de Chicote Calderón le dio vida de cara a la revancha en Culiacán.
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Para dar vuelta la serie y clasificar a Cuartos de Final, el cuadro de Luis Fernando Tena deberá marcar al menos un gol para empatar el resultado global.
En esta competición no existe la regla del gol de visitante, lo cual supone una ventaja para Chivas tras los dos goles recibidos en casa. Por eso, con empatar la serie le alcanzará sin importar la cantidad de anotaciones de visita.
En caso de llegar igualados al final del partido, la llave irá directamente a los penales, sin prórroga.
Así las cosas, aunque muchos quieran dar por muerto al Rebaño, lejos está de suceder: las chances de dar vuelta la serie están más que vigentes.
