Alexis Vega, delantero de las Chivas de Guadalajara, recordó el martes lo complicado que le resultó recuperarse de la lesión que sufrió con la Selección de México Sub-23 u Olímpica en un partido amistoso contra Cruz Azul en la capital de la república y reconoció que ese grupo ya se "conoce bastante" como para necesitar otro microciclo antes de la preparación al torneo Preolímpico de la Concacaf en la Perla Tapatía, para los postergados Juegos Olímpico de Tokio 2021.

El portentoso atacante del Club Deportivo Guadalajara se lesionó durante un microciclo en noviembre pasado con el Tri de la categoría Sub-23 u Olímpica en el Centro de Alto Rendimiento (CAR) de la Federación Mexicana de Futbol (FMF) en la capital y le ha costado mucho regresar a su forma física, a tal punto, que apenas en la fecha anterior fue que pudo regresar a una alineación inicial de los tapatíos durante el empate 1-1 con Toluca en el Estadio Akron, en el marco de la segunda jornada del Torneo Clausura Guard1anes 2021 de la Liga MX.

Alexis Vega es una de las piezas inamovibles en la convocatoria del combinado nacional para disputar en marzo ese Preolímpico en Guadalajara, pero aseguró que preferirá quedarse en Verde Valle en caso de alguna concentración previa a la preparación final para ese evento al argumentar que "para Jaime Lozano y su cuerpo técnico es importante reclutar otra vez a los jugadores, para poder planear un buen Preolímpico, también a la vez yo siento que no necesita mucho, porque los jugadores se conocen bastante. Es una camada de jugadores que ya hemos jugado en algunos equipos, o en selección hemos estado mucho tiempo, nos conocemos bastante".

El atacante de las Chivas añadió en su postura que "y para mí, a veces hay microciclos en los cuales es bueno entrenar, pero sabemos que son Fecha FIFA en las cuales podemos estar tranquilos en nuestros equipos entrenando, sin arriesgar a alguna lesión, como me pasó a mí, y yo ahorita lo veo desde otra forma. Prefiero quedarme si hay microciclo, entrenar".

Vega, en noviembre durante un microciclo que incluyó un amistoso con Cruz Azul, fue lastimado por Ignacio Rivero, quien le provocó un esguince de segundo grado en el tobillo que lo alejó del plantel de las Chivas por varios compromisos, incluida gran parte de la Liguilla. Por lo que reconoció que "no me encontraba al 100 por ciento, no podía caminar bien, cojeaba bastante, porque me dolía mucho el tobillo, porque lo tenía bastante inflamado".

El delantero del Guadalajara fue hasta el sábado pasado cuando pudo recuperarse, aunque aceptó todavía no estar en buen estado físico. Por lo que aprovechó la pretemporada para trabajarlo como parte de su rehabilitación y aseguró que "empezó el torneo y no tenía ritmo, porque venía sin jugar, sin entrenar. Del tobillo me encuentro perfectamente ya, gracias a Dios, se curó muy bien la lesión, pero sí el tema físico es el que me está costando ahorita, empezar a retomar ese ritmo que tenía el torneo pasado".