La crónica de una traición anunciada se ha consumado. Rodolfo Cota se ha convertido oficialmente en nuevo jugador del América, y con ello, su estatus como “leyenda” de Chivas se desmorona, al sumarse a una reducida lista de jugadores que eran considerados un emblema del Rebaño Sagrado, pero partieron a Coapa para alejarse de esa condición.
Este viernes 21 de junio, el equipo azulcrema lo oficializó. La llegada del experimentado portero que recién se haba desvinculado del Club León, garantiza que la portería milloneta estará cubierta para el inicio del Apertura 2024 de la Liga MX, esto, debido a la lesión muscular que Luis Ángel Malagón sufrió con la Selección Mexicana, misma que lo dejará fuera entre un mes y medio.
Lesión de Malagón hará a Cota titular con América
Tras la sensible baja de quien estaba llamado a ser titular del Tri en la próxima Copa América 2024, la directiva de las Águilas buscó a un sustituto, toda vez que Oscar Jiménez parece que no es de la confianza de André Jardine para ser el titular mientras que Malagón se recupera. De esta forma, el veterano de 36 años —quien no entraba en planes de Jorge Bava con los Esmeraldas, por lo que los esmeralda lo soltaron a préstamo—, ha consumado la traición al rojiblanco.
De hecho, Cota ya entrenó con el equipo crema en las instalaciones de Coapa, bajo las órdenes de Jardine, por lo que podría tener minutos muy pronto, en el próximo amistoso ante Bravos FC de Ciudad Juárez el próximo domingo en El Paso, Texas. Cota se une a la lista de jugadores que han vestido tanto la camisa rojiblanca como la azulcrema.
Rodolfo Cota y un pasado que era perfecto con Chivas
El experteneciente a Grupo Pachuca estuvo desde 2015 hasta 2018 con el Rebaño Sagrado, que bajo las órdenes de Matías Almeyda, consiguió el título del torneo Clausura 2017 , dos Copas MX y una Súpercopa MX.
Resalta que el América volvió a fichar a un futbolista con pasado en Guadalajara por segundo torneo consecutivo, ya que anteriormente, con Chicote Calderón hizo lo propio, aunque es claro que Cota estaba mucho más identificado con los colores del chiverío sin tener que besar el escudo como hacía Calderón.