La manera en que Fernando Gago se fue de las Chivas de Guadalajara dejó uno de los recuerdos más amargos de los que se puede tener memoria en las últimas décadas, ya que más allá de lo que hizo dentro de la cancha, la forma en que manejó el interés por marcharse cimbró no solo el ánimo de los jugadores, también la credibilidad que se había ganado en un sector de la afición. 

En el Rebaño Sagrado una decepción más se sumó a la historia del equipo más importante del futbol mexicano, que quedó al descubierto por la manera en que Fernando Gago intentó controlar la situación acerca de su salida a Boca Juniors, pues en todo momento exhibió una falta de liderazgo al interior de la directiva comandada por Fran Pérez y Juan Carlos Martínez, pero sin dejar de lado a Amaury Vergara.

Fernando Gago nunca estuvo a la altura de los chivahermanos 

Muchas situaciones se dijeron con la llegada de Gago a Chivas, no solo por el radical cambio de personalidad con respecto al entrenador más inmediato como lo fue Veljko Paunovic, quien desde su primer mensaje público intentó conectar con los seguidores tapatíos, reconociendo la grandeza de club y tratando de meterse de lleno en la ideología de la institución.

Gago llegó con grandes ilusiones a Chivas. (Foto: Alfredo Moya/JAM MEDIA)

Gago, por su parte, jamás tuvo ese interés, nunca emitió un solo comentario para los chivahermanos, en las serenatas que muchas veces recibió el equipo brilló por su ausencia y nunca dio una entrevista para conocer sus expectativas y motivaciones estando en el banquillo de Guadalajara, salvo una charla que sostuvo con Luis García de TV Azteca, donde tampoco profundizó mucho acerca de algún tema.

Desde que se empezó a filtrar la información sobre su salida, la afición en todo momento le recriminó haber mentido en la conferencia de prensa tras el Clásico Tapatío, donde aseguró al periodista de ESPN, Jesús Bernal: “¿Qué quieres que te diga? No tengo ninguna oferta, no tengo nada. No lo entiendo”.

Por tal motivo, es considerado uno de los técnicos más mentirosos que han pasado por la institución, más antipáticos y de los que menos identidad lograron con el público que en muchas ocasiones le manifestó su apoyo, pero que con sus actos con tal de cumplir su sueño de dirigir a los Xeneizes, prefirió dejar botado el trabajo y la dignidad, con lo cual es prácticamente un hecho que a México no volverá jamás. 

Los números de Gago en Chivas 

Fernando Gago dirigió 32 partidos a Guadalajara con un saldo de 14 triunfos, nueve empates y nueve derrotas, superando el 50% de efectividad, cifras que a todas luces no son nada despreciables, pero haber perdido el Clásico Tapatío en medio de la crisis, le restó credibilidad al resto de su proyecto.

El estratega obtuvo buenos resultados dentro de la cancha. Foto: Imago7/ Rafael Vadillo

Además de ello, jugó siete Clásico Nacionales ante América de los cuales únicamente ganó uno, perdió tres y empató tres, es decir, su balance fue totalmente negativo, ya que fueron eliminados en la Concachampions por el acérrimo rival y también de la Liguilla pasada en las Semifinales, situación que tampoco le perdonó la afición.

Los puntos positivos de Gago con Chivas 

Uno de los aspectos que sí cumplió y por el cual en algún momento Fernando Hierro decidió darle la oportunidad de llegar al Rebaño fue su trabajo con los jóvenes y ante ello elementos como Gael García, Mateo Chávez, Raúl Rangel, Leonardo Sepúlveda y Armando González, fueron parte de los juveniles que tuvieron su primera oportunidad en Liga MX o de alguna manera fueron más recurrentes con el primer equipo.

Mateo Chávez debutó con Gago en Liga MX. Foto: Imago7/Rafael Vadillo

Aunque del lado contrario, elementos como Yael Padilla, Jesús Brígido y José Juan Macías terminaron o fuera de la institución como los últimos dos futbolistas o con pocos minutos como ha sido el caso del joven de 18 años que apenas ha tenido actividad en la prénsente campaña, por lo que en este aspecto se puede decir que Gago hizo una labor de aceptable a regular. 

De cualquier manera existe un registro negativo en el ánimo de los chivahermanos para pensar en que Gago merece un grato recuerdo, pues su personalidad dentro y fuera de la cancha tampoco dejan mucho margen de maniobra para pensar en que se perdió más de lo que se ganó, pero esto solo el tiempo lo dirá…