En los Superclásicos frente al América son varios los jugadores de las Chivas de Guadalajara que han dejado su huella imborrable en varias ediciones del partido más importante del fútbol mexicano. Uno de ellos fue Alberto Coyote, mediocampista de contención de carácter y fuerza recordado por la porra.
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Fiel a su estilo, resaltó el sentido de lucha con los que hay que jugar contra el contrincante más acérrimo. "Me tocaron Clásicos muy bonitos pero el 2-3 en el Azteca (temporada 1995-96) fue muy significativo por ganarles en su casa, por la forma en la que se levantó el equipo. La verdad es que ganarle al rival más odiado deportivamente y en su territorio no se puede describir", dijo.
Coyote enfatizó en los duelos mano a mano que tuvo con figuras de los azulcrema como Alberto García Aspe y Rodrigo Lara, pero al que más disfruto como rival fue a Isaac Terrazas. "Era durísimo pero leal en el sentido que le pegabas y no decía nada, así que si él te pegaba te tenías que aguantar".
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El exjugador disfruta de transmitir su visión del fútbol ahora como entrenador de la sub-20 y ve en las fuerzas básicas chivas. "Sigue existiendo la pasión por la rivalidad deportiva entre ambas instituciones. En ls sub-20 trato de transmitir esa entrega, que jugada a jugada tengas que disputar la pelota con todo", añadió.