Con la partida de Jorge Vergarade este plano existencial, la responsabilidad de manejar a las Chivas del Guadalara quedó en manos de su hijo, quien tiene muy claro el tamaño del reto que tiene por delante y no piensa decepcionar a su padre.
“Chivas es un reto grande para mí, es el más grande de mi vida. Estar a cargo de Chivas no es ago sencillo, hay que estar comprometido al 100% todos los días. Hay mucho que cuidar, construir, mejorar y arreglar”, explicó Amaury.
Para el presidente del Rebaño Sagrado es una gran oportunidad tomar al equipo en estos momentos ya que en los últimos años no han conseguido los resultados esperados por lo que espera devolverlo al lugar a donde pertenece.
En cuanto al desempeño mostrado en el Clausura 2020 dice estar contento más no satisfecho porque el equipo no ha sido de todo consistente.
“Decir que estaba satisfecho sería serconformista. Creo que el equipo iba a bien, pero obviamente aspiramos al primer y tener una constancia que es lo que más nos ha costado trabajo en este torneo”, continuó.
Sin embargo declaró que con el pasar de los partidos el equipo mostró mejoría y que podía trabajar en los errores cometidos por lo que sigue confiando plenamente en Luis Fernando Tena.