Chivas comenzó el año muy bien desde lo futbolístico, con un gran debut y una plantilla que promete pelear por títulos. Sin embargo, la nota negativa vino por fuera del campo de juego con el doping positivo que dio Víctor Guzmán. En ese contexto, Ricardo Peláez se reunió este miércoles con los jugadores y les recomendó seguir el código de ética que firmaron el viernes.

 

Un código de ética es un conjunto de reglas por el cuál un profesional rige su actividad en pos del bien común desenvolviéndose en un ámbito de honestidad, legitimidad y moralidad. Según El Universal, este tipo de documento le presentó el directivo al plantel con el objetivo que cuiden sus carreras, sean responsables en su tiempo libre y no tengan distracciones fuera del futbol.

En la plática, Peláez insistió en las cosas que pueden pasar y cómo deben cuidarse para evitar algún malentendido. El compromiso fue aceptado por los jugadores para ir todos juntos por la misma meta.

En esa línea, la semana pasada Jesús Molina había expresado el nivel de concentración que tiene el plantel: "Tenemos que ser jugadores 24/7 si queremos lograr ese objetivo. Es un sacrificio, si se puede llamar así, de seis meses para lograr el objetivo final que es el campeonato, así que yo creo que todos estamos pensando en eso". Por lo que la idea está fija en el equipo hace tiempo y el incidente de Pocho Guzmán no hace más que reafirmarla.