Las Chivas de Guadalajara anhelan que todos sus canteranos tengan la proyección con la que saltan al profesionalismo. Pero muchos han sido los casos de futbolistas que no logran consolidarse como se espera, pasan de la fama y fortuna a prácticamente quedar en el olvido.
Este es el caso de Raúl Gudiño, el arquero que surgió de las fuerzas básicas del Rebaño Sagrado, pero antes de debutar con el primer equipo dio el salto al futbol de Europa donde estuvo en varias escuadras, al ser adquirido a préstamo por el Porto B de Portugal.
Sin embargo, fue cedido al Unión Madeira y más tarde al APOEL de Chipre en el 2017, justo donde pudo cumplir el sueño de disputar la Champions League, en un partido frente al Borussia Dortmund. Con esto se convirtió en el primer portero mexicano en jugar un partido de la máxima justa a nivel de clubes. Lo hizo ingresando en la segunda parte debido a la lesión del guardameta titular, Boy Waterman.
Gudiño regresó a México en el 2018 como refuerzo de Chivas, pero sus actuaciones nunca fueron del todo convincentes, además, llegó para el Apertura 2018, justo cuando se había marchado Matías Almeyda y el conjunto rojiblanco buscaba reorganizarse de cara a Mundial de Clubes que resultó decepcionante con José Cardozo al mando.
El arquero se mantuvo en el equipo pero fue alternando la titularidad con José Antonio Rodríguez y más tarde con Miguel Jiménez. En el 2022 fue cedido al Atlanta United de la MLS y en el 2023 volvió a México para enrolarse en Necaxa hasta el 2024.
Raúl Gudiño no tiene equipo
Al principio del 2025 se hizo oficial su llegada a los Venados de Mérida de la Liga de Expansión, donde al final de la campaña anterior lanzó una publicación extraña que parecía una despedida y pese a que en el portal Transfermarkt aparece como parte del equipo yucateco, en lo que va de la campaña no está registrado entre la plantilla del conjunto que dirige Rigoberto Esparza, por lo que no tiene equipo.