Para nada bien cayó en la afición de las Chivas de Guadalajara la actitud tomada por la directiva de adelantar la llegada a Ciudad de México para el juego ante Pumas, provocando la suspensión del banderazo que tenían programado para recibir al equipo en la capital.
Según explicaron desde la institución a la cadena ESPN, la situación se produjo por motivos logísticos que obligaron a alterar la planificación inicial previa al partido.
“Este viernes volaron muy temprano pero a la ciudad de Toluca, desde donde se trasladaron vía terrestre a la capital del país. Los integrantes del plantel tapatío volaron al Estado de México en punto de las 5:30 horas, de ahí se trasladaron a la Ciudad de México. Esto por conveniencia logística y deportivas del club”, señalaron al medio.