Las Chivas de Guadalajara todavía se encuentran en plena planificación para el Clausura 2025. Todo indica que el gran objetivo del equipo en este mercado de fichajes está centrado en reforzar el mediocampo. Con nombres como Orbelín Pineda, Luis Chávez y Jordi Cortizo en la órbita rojiblanca, queda claro que el club busca solucionar una de las áreas donde más ha sufrido en los últimos torneos: la creación de juego y el desequilibrio en la zona medular.
Un mediocampo que pide refuerzos
La carencia de mediocampistas de primer nivel ha sido evidente para Chivas en las últimas temporadas. En el Apertura 2024, la responsabilidad recayó principalmente en Fernando González, Fernando Beltrán y Érick Gutiérrez, con Víctor Guzmán alternando como opción en ciertos partidos. Sin embargo, ninguno logró consolidarse como una solución definitiva para los problemas del equipo en la construcción de juego ofensivo.
Por si fuera poco, los últimos fichajes en el mediocampo, Omar Govea y Daniel Aguirre, casi no tuvieron participación durante el torneo. Esto demuestra no solo la necesidad de sumar variantes en esa zona, sino también las dificultades para encontrar jugadores que encajen en el sistema del nuevo entrenador, Óscar García.
Con la lesión del Pocho Guzmán, incluso, las opciones se reducen aún más en la medular. De hecho, uno de los que aprovechó la oportunidad fue Daniel Aguirre, quien hasta el momento no vio minutos de manera oficial con el Rebaño, pero sí que dejó buenas sensaciones en la pretemporada, donde jugó los tres partidos amistosos.
Los juveniles, solución momentánea pero no definitiva
Durante la reciente pretemporada, Óscar García ha probado a algunos juveniles en el mediocampo, en busca de alternativas para el Clausura 2025. Por ejemplo, Matías Cendejas sumó minutos como contención y también como zaguero; Diego Ochoa, de apenas 19 años, también fue contención frente al Atlas a pesar de que habitualmente se desempeña como defensa central.
El perfil de los posibles refuerzos
Entre los nombres que suenan con fuerza destaca el de Orbelín Pineda, quien estaría cerca de concretar su regreso al club. Su capacidad para aportar desequilibrio y creatividad desde la mitad de la cancha hacia adelante lo convierten en un refuerzo de primer nivel para el equipo.
Luis Chávez es otro jugador que despierta interés en el Rebaño: su inteligencia y capacidad para distribuir el balón, como así también para rematar de media distancia, lo convertirían en una opción ideal para reforzar el mediocampo. Incluso, Jordi Cortizo sigue en carpeta, siendo uno de los mediocampistas más desequilibrantes de la Liga MX en la actualidad.