Vázquez habló de sus inicios, sus ídolos y su cariño hacia el Guadalajara.
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Juan José Vázquez no es de brindar demasiadas entrevistas, pero en esta dejó realmente varios títulos. Hizo un repaso de diversas cuestiones con Mediotiempo y hasta sorprendió con algunos testimonios. Hoy pieza inamovible en el esquema de Matías Almeyda, no fue todo tan sencillo y exitoso para él en el mundo del fútbol.
Primero se refirió a Roque, ese pequeño pueblo de Guanajuato con apenas 4000 habitantes en el que nació: “Cada que voy ahí lo hago con mucho orgullo, con mucha emoción y a recargar pila con todos mis seres queridos.Fui un niño inquieto, pero la escuela fue fundamental, tuve una familia bastante grande, eso fue complicado para mis padres, pero siempre fui un niño alegre, siempre andaba para arriba y abajo y la pelota nunca la dejaba”.
“Cuando conocí de casualidad a Coyete se ofreció a llevarme al Estadio. Es un gran tipo”.
Además, reveló una muy buena anécdota de cuando conoció a Alberto Coyote, su ícono a seguir como jugador profesional, por el puesto y por otro montón de cuestiones:”Yo recuerdo a ese Chivas de Camilo Romero, de Gustavo Nápoles, de ese equipo que fue Campeón en el 97′, incluso mi hermano tenía un cuadro de ellos en la casa. Para mí es un referente Coyote, una inspiración por el lugar de donde viene. En media cancha me gustaba que iba para adelante, tocaba fácil y cada pelota la peleaba a muerte. Una vez llevé mi carro al servicio y resultó que vivía en el mismo fraccionamiento que yo. Se paró y se ofreció a llevarme al Estadio, yo me quedé dudando si sería él o no. Empezamos a platicar y fue algo muy raro, curioso y mira dónde me lo vine a encontrar, no fue en las canchas, la verdad que es un gran tipo”, completó el Gallo.