Luego de un año a préstamo en Querétaro, el Wero jugó casi media hora frente a Pumas.
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Carlos Fierro es uno de los tantos rojiblancos que prometían bastante en las Fuerzas Básicas de Verde Valle pero después poco pudieron hacer en Primera División. Por ello, porque jamás llegó a explotar, fue cedido durante todo 2016 a Querétaro para que tuviera más continuidad y allí el ofensivo marcó cuatro goles.
Se quedó pese a sus diferencias con Higuera.
No obstante, los problemas financieros de los Gallos Blancos no les permitieron hacer uso de la opción de compra, y Matías Almeyda y compañía decidieron volver a tenerlo en sus filas más allá de algunas diferencias del Wero con José Luis Higuera. Así fue que, un año más tarde, el extremo retornó a vestir la playera más linda en Guadalajara y se dio el lujo de jugar casi media hora, ya que en el complemento sustituyó de buena manera a Ángel Zaldívar.
+ Fierro, entre los que se quedaron en promesa
A los 22 años, Fierro y el club en sí desean que de una vez explote en la institución que lo vio nacer como jugador. Claro que se puede, Wero.
Foto: Mexsport.
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Ingresó a los 67 por un flojo Zaldívar:
