El entrenador argentino Gabriel Milito acaba de ser presentado como nuevo entrenador de las Chivas de Guadalajara. Es sabido que el estratega de 44 años tuvo una destacada trayectoria como futbolista, donde incluso llegó a formar parte del mítico Barcelona dirigido por Pep Guardiola, considerado por muchos fanáticos del futbol como el mejor equipo de la historia.
Pero incluso antes de llegar al conjunto blaugrana, Gabriel Milito estuvo a punto de firmar con el otro gigante español: Real Madrid. El zaguero central venía de brillar en Independiente, el club de sus amores, donde fue campeón en 2002. Pero sin embargo, al ser pretendido por el conjunto Merengue, surgieron dudas sobre su estado físico, algo que no le gustó nada al argentino.
En una antigua entrevista para la revista El Gráfico, Gabriel Milito detalló cómo fue su truncho fichaje: “Un viernes se cayó mi pase al Real Madrid, y el sábado estaban los dirigentes del Zaragoza en el hotel de Madrid donde me alojaba para contratarme”. Según explicó el ex marcador central, los Maños ya lo venían buscando desde antes y no dudaron en aparecer cuando se enteraron de la caída del pase.
El Real Madrid, según comentó Milito, sólo estaba dispuesto a firmarlo con una condición: “La única salida que proponía el Madrid era que me quedara a préstamo por un año y si en ese año no había problemas, me contrataban”. La respuesta de Milito fue tajante: “Les dije: ‘Olvídense, me voy a Zaragoza’”.
Aquella no fue una decisión improvisada. El defensa argentino tenía claro que confiaba en su nivel a pesar de la desconfianza que tenía el Real Madrid por su estado físico: “Me habían buscado para hacerme un contrato de cuatro años y yo no tenía ninguna duda de cómo estaba. ¿Ellos sí las tenían? Perfecto: los respeto, pero contraten a otro. Tomé la decisión convencido”.
Gabriel Milito se tomó revancha del Real Madrid
Milito se fue al Zaragoza y, apenas ocho meses después, se cruzó con al Real Madrid en la final de la Copa del Rey. “Increíble, ¿no? Y la ganamos con un gol de Galletti en el alargue”, recordó. Al año siguiente, también conquistaron la Supercopa de España ante el Valencia de Rafa Benítez. “Aparte de buenos jugadores, ese equipo tenía convencimiento, mentalidad”, rememora.
Zaragoza fue más que un equipo para él flamante entrenador de Chivas. “Es el club donde pude jugar dos años con mi hermano, algo que sólo hice en algunos partidos con la Selección. Es la ciudad donde nació mi primer hijo y donde sigo teniendo mi casa. Paso por ahí cada vez que viajo a Europa”, contó quien ahora, desde Guadalajara, asume un nuevo desafío en su carrera.