Fue el 31 de julio de 2010 cuando Chicharito Hernández clavó su último gol con el Guadalajara antes de emprender la historia más gloriosa de un canterano de Chivas en el Viejo Continente. De hecho aquella noche, el máximo anotador en la historia de la Selección Mexicana de Futbol le anotó al Manchester United, equipo que le dio su primera oportunidad en Europa y con el que el Rebaño Sagrado inauguró el Estadio Akron.

Luego de regresar al redil tras 14 años de triunfar en el extranjero, CH14 aún busca su primer gol luego de 13 años, 8 meses y 3 días después de aquella anotación contra los Red Devils. Actualmente, Hernández Balcázar acumula 180 minutos de mil 530 posibles con Chivas en el torneo Clausura 2024 de la Liga MX, mismo en el que aún no ha podido marcar, debido a que en sus primeros juegos apenas se recuperaba de una severa lesión de rodilla.

Recuperado del dolor de estómago, Chicharito

Para colmo, el último juego disputado por el ariete de 35 años fue ante las Águilas del América, acérrimo rival del Rebaño Sagrado, antes del parón de la Fecha FIFA, pero después se enfermó del estómago y eso provocó que no fuera convocado para el duelo ante Rayados de Monterrey el fin de semana anterior.

Recuperado, Chicharito está disponible en caso de que el técnico argentino Fernando Gago decida darle juego ante el Puebla. De tener minutos, el delantero de gran paso por el Bayer Leverkusen tendría una oportunidad única para volver al gol con el Rebaño, pues el conjunto camotero es el más goleado del certamen con 34 goles en contra, es decir, recibe más de 2.6 goles en promedio cada partido.

¿Qué dijo Villa Villa a CH14?

“Ya deseamos volver a festejar un gol tuyo con los colores que tanto amas. Hoy puede ser, Javier”, animó en sus redes sociales Omar Villarreal Villalbazo, reportero de TV Azteca y confesado aficionado del equipo más querido de México.

Según reportes, ‘Pintita’ iría contra La Franja con Ricardo Marín como delantero centro en el XI inicial, por lo que Javier Hernández tendría que buscar minutos desde el banquillo de suplentes a la espera de poder reencontrarse con el gol.