Uno de los cruces que quedará en la historia de todo el futbol mexicano es el que protagonizaron el Club Deportivo Guadalajara y el Club América en 1983. En aquel momento el gran candidato de la máxima categoría de México era el conjunto azulcrema, que había sido primero en la temporada regular con un poder de gol temible.

Sin embargo, Chivas dio la campanada al revertir la serie en el Estadio Azteca. Más allá de lo estrictamente deportivo, el partido de vuelta es recordado por la batalla campal que se desató luego del tercer y último gol de la escuadra tapatía, que estuvo a cargo de Roberto Gómez Junco.

Aquella riña le salió muy cara a la escuadra tapatía, ya que terminó con una gran cantidad de jugadores suspendidos, lo que rebajó sus posibilidades en la final que perdió por penales contra Puebla. Ahora, quien recordó aquel cruce emblemático fue Eduardo de la Torre.

“El América era invencible, era ese América que rompió récords y la verdad jugaba muy bien. Van y nos ganan en nuestra casa, en el Jalisco. Para el partido de vuelta, la verdad que todo el mundo ya lo daba como un hecho (la clasificación del América a la final). Junto con el técnico hicimos un plan: jugar al límite. La verdad que nos salió excelente”, comenzó su relato.

Gómez Junco se pasó en el festejo y Carlos Reinoso envió a un auxiliar a reclamar

“Empieza el juego y metemos el 1-0, luego de repente metemos el segundo y ahí fue cuando el América empezó a desestabilizarse, tanto por el marcador por cómo encaramos el partido. Luego vino el 3-0 y ahí Roberto Gómez (yo estaba en la banca en ese momento) empezó a hacer como una vuelta olímpica hasta llegar a la banca del América. No a burlarse, pero sí a festejarlo”, continuó Yayo.

Además, en el podcast de Alex Blanco, agregó: “Yo creo que Carlos Reinoso algo le dijo a un auxiliar: ‘Ey, métete’. Porque fue tanta la frustración que no lo soportaron. Le dijo algo al auxiliar para que fuera a provocar a Gómez Junco. Para reclamarle. Y ahí empezó todo. Brincaron todos”.

De la Torre recordó aquella batalla campal, que condicionó sobremanera a Chivas para la final. “Eran golpes por todos lados. Expulsaron a varios de los 2 equipos, sí. Pero después hubo una revisión en video y todo lo demás”, concluyó quien también fue director técnico del Guadalajara tiempo después.