Las Chivas de Guadalajara y América sostendrán otro partido de la rivalidad más importante que existe en el futbol mexicano y se trata del Clásico Nacional donde ambos equipos dividirán al país en busca de salir airosos en el duelo por la Jornada 7 del Torneo Apertura 2024 que se celebrará en el Estadio Ciudad de los Deportes.
El Rebaño Sagrado ha sostenido grandes batallas a lo largo de la historia contra el acérrimo rival, pero fue en la década de los 80 cuando hubo varias pelas que detonaron la rivalidad y no solo por la animadversión que existía entre los mismos futbolistas de cada equipo, sino por lo que se jugaban en aquel entonces.
Uno de los momentos más memorables fue el que se vivió en la Semifinales de la temporada 1982-1983, cuando Chivas cayó en casa en el partido de Ida y para la vuelta, en el Estadio Azteca, se impusieron 4-2 en el marcador global para avanzar a una de las Finales más tristes en la historia del conjunto rojiblanco, porque perdieron ante Puebla con ocho suspendidos justo por la pelea con los azulcremas.
Roberto Gómez Junco fue el causante de la bronca en 1983 entre Chivas y América
“Sí, fue en la Semifinal del 83. Es lo que más recuerdan de mí. América había roto todos los récords en esa campaña, nos ganó en la Ida 2-1, y en la Vuelta cuando metemos el tercero, en un partido muy accidentado, en ese momento estábamos 10 contra 9, un expulsado de Chivas y dos del América, así se jugó todo el segundo tiempo, ya habíamos metido dos goles e íbamos un gol arriba, 3-2 en el global, entonces el América necesitaba un gol, pero en un balón que recupero, conduzco y se lo doy a Sammy Rivas que dispara y marca el tercer gol. Yo, como había hecho la jugada por izquierda, al festejar de repente veo a la banca del América, y sí festejé excesivamente, un error que me perdono a mí mismo porque tenía 27 años. Fue un festejo excesivo y brincaron los de la banca para tratar de agredirme, y los golpes empezaron en la cancha”.
“Los exchivas dejamos de hablar de esa Semifinal porque al año siguiente el América nos gana la Final, la única Final que se ha jugado entre América y Chivas en el 84. Quedó una especie de trauma para todos los exchivas, para unos en menor o mayor medida, porque lo vas absorbiendo como puedes y ya no presumes tanto lo de aquella Semifinal, pero queda ese recuerdo mío del festejo y que hice muy mal”, fue parte de lo que comentó Roberto Gómez Junco a Mediotiempo.
Recientemente Roberto Gómez Junco conversó con Rebaño Pasión donde confesó que después de su carrera profesional nunca pensó en dedicarse a ser directivo o entrenador, ya que siempre ha preferido ver el futbol desde los medios de comunicación y no encerrarse en trabajar con un solo equipo.