Las Chivas de Guadalajara pueden catapultar la carrera de cualquier futbolista que muestre sus grandes condiciones, pero esto también debe ir acompañado de oportunidades de que se muestren dentro del terreno de juego, lo cual no sucedió con Jorge Mora, el atacante que surgió de la cantera rojiblanca de manera brillante.

Jorge Mora es hijo de Octavio Mora, uno de los futbolistas más recodados de Cruz Azul en la década de los 80, por lo cual se pensaba que el hijo tendría una carrera igual o más exitosa que el padre, pero la realidad es que, hasta el momento, se ha quedado corto y no es por falta de talento.

El Gordo Mora como también es conocido, nació en Guadalajara el 16 de enero de 1991, su formación futbolística se dio en las fuerzas básicas de Chivas, empezando desde la Tercera División en el 2007 hasta llegar a la Primera División en el 2011. Fue en un partido contra Pachuca, el 19 de febrero de ese año, cuando hizo su aparición y vaya de qué manera.

Jorge Mora entró a la cancha y a apenas a los 25 segundos se encargó de marcar su primer gol, luego de un estupendo pase de Erick el Cubo Torres, con lo cual se pensaba que su carrera crecería como la espuma, no obstante, sucedió todo lo contrario, ya que nunca encontró la regularidad que se esperaba y un año más tarde se fue a Correcaminos donde empezó su andar por varios clubes.

Jorge Mora cuenta con 33 años actualmente. Foto/Imago7/Juan Mejia

Jorge Mora brilló en su debut y ahora juega como talachero 

El Gordo Mora pasó por varias escuadras como Cruz Azul Hidalgo, Leones Negros, Coras Tepic, Salamanca, Tepatitlán, por mencionar algunos, incluso tuvo una incursión en el Salamanca de España del 2020 al 2021pero regresó a Mexico y después de jugar con Durango y Oaxaca decidió empezar su andar por equipos de algunos pueblos al interior de las República Mexicana.

En una entrevista con el periodista José María Garrido, Mora reveló que juega con escuadras  de distintas localidades del país donde los premios a repartir son casi millonarios, pues indicó que en algunos torneos les pueden ofrecer más de un millón de pesos por equipo, lo cual termina por ser repartido entre todos los jugadores, razón que le ha parecido atractiva para seguir su carrera fuera del profesionalismo, pero con mejores ganancias que en torneos como la Liga de Expansión.