Las Chivas de Guadalajara están muy cerca de cerrar uno de sus peores torneos de los últimos dos años y medio, donde la clasificación al Play In luce muy complicada, por tal motivo no se descarta que empiecen a sonar los nombres de jugadores que podrían reforzar la plantilla para el Apertura 2025 que arrancará en julio.
El Rebaño Sagrado tiene tres duelos por delante donde está obligado a la victoria para soñar con un lugar en la lucha por el título, lo cual tiene con mucha presión al entrenador Gerardo Espinoza, quien prácticamente es un hecho que no seguirá en el banquillo, a menos que algo extraordinario suceda en el resto del certamen.
Chivas iría por uno de sus jugadores soñados
Las Chivas llevan al menos un par de torneos con la mira puesta en un jugador como Sebastián Córdova, quien es desequilibrante del tres cuartos de cancha hacia el frente tal y como ha sucedido con Roberto Alvarado y como se intentaba que ocurriera con Víctor Guzmán, por tal motivo esta es la mejor oportunidad para los rojiblancos para ficharlo.
Y es que de acuerdo a algunos reportes de Futbol Total, Guadalajara podría aprovechar que el contrato del atacante de los Tigres de la UANL termina en diciembre y Córdova no descarta la posibilidad de salir de la Sultana del Norte, por lo cual la dirigencia que comanda Amaury Vergara tendría la mejor oportunidad de contratar al talentoso futbolista.
“La historia entre Chivas y Sebastián Córdova podría tener un nuevo capítulo, pues el Rebaño ha buscado anteriormente al mexicano. El contrato de Sebastián con Tigres termina en diciembre. Habrá sobrecupo en su posición y Tigres busca hacer caja para enfrentar el fichaje. Chivas ya tiene todo en la mesa para dar el golpe y cumplir el sueño que se frustró en 2021”, fue parte de lo que publicó el citado medio.
Otras versiones indican que los felinos desean a Roberto Alvarado y esto sería parte de las negociaciones, aunque si el contrato de Córdova expira, Guadalajara lo podría llevar gratis, pero en el caso del Piojo sí tendríanque desembolsar una fuerte suma para pagar su cláusula de rescisión que es superior a los 10 millones de dólares y tampoco suena sencillo que en la Perla Tapatía lo dejen salir.