Los festejos de Armando González se volvieron virales en la Liga MX, pero pocos saben que su historia comenzó mucho antes de que debutara en Primera División. Recientemente, en plática con TV Azteca durante su estadía con la Selección Mexicana, la Hormiga contó cómo nació la idea que hoy ilustra cada celebración del campeón de goleo mexicano.

Todo se remonta a la Sub-17 de Chivas, justo después de la pandemia, cuando Armando pasaba mucho tiempo en Casa Club viendo anime. “Yo estaba viendo Naruto. Así, normal. Y dije: ‘Oye, estaría chido que ahora que ya vamos a volver a jugar, cuando meta gol, hacerla así’”, recordó el delantero.

La idea no fue del agrado de su compañero de cuarto, André Marioni Ham, quien le decía: “No, no la hagas así, güey… ¿cómo vas a andar haciendo eso?’. Ni tienes novia”, dijo entre risas. Pero la Hormiga ya lo tenía decidido. “Le dije: ‘No importa, vas a ver que sí la voy a hacer. Va a quedar chido’”.

Y así fue. En cuanto volvió la competencia, llegó el momento: primera jornada contra Toluca, gol y festejo. “Me acuerdo clarito… metí el gol y lo hice. Desde ahí ya no lo solté. Desde la 17 lo vengo haciendo”, contó orgulloso.

El sello distintivo del campeón de goleo

Ese pequeño gesto improvisado terminó por convertirse en un sello personal. Con los años, la Hormiga fue sumando referencias de Dragon Ball, Jujutsu Kaisen y Blue Lock, pero el origen sigue siendo el mismo: un adolescente en Casa Club, un anime en la pantalla y la idea de convertir su pasión en un festejo único.