Chivas y América son los dos equipos más importantes del futbol mexicano. Ambas escuadras son las más ganadoras en la Liga MX y también las que tienen una mayor cantidad de aficionados. El Clásico Nacional, más allá de etapas de mayor o menor brillo, es un enfrentamiento que sigue despertando mucha pasión entre los aficionados y que no deja indiferente a nadie.
Esta rivalidad lleva muchos años de historia y cada partido ganado ante el rival de siempre se disfruta como si fuera un título en sí mismo. Ni que hablar, cuando se trata de encuentros en condiciones especiales, que se resolvieron de forma dramática o que terminaron en resultados contundentes. En este caso, nos vamos a detener justamente en esos momentos que son difíciles de olvidar. En Rebaño Pasión te invitamos a recorrer Los más grandes triunfos de Chivas en la historia del clásico.
Pasaje a la final
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Una de las remontadas más memorables en la historia de esta rivalidad se dio en el Clausura 2023. El equipo dirigido por Veljko Paunovic consiguió su boleto a la gran final del futbol mexicano a costa de las Águilas. América se impuso en la ida por 1-0, con gol de Alejandro Zendejas en el Estadio Akron, lo que dejaba la serie virtualmente definida, teniendo en cuenta que los azulcremas definían una serie a su favor en su cancha.
Al Rebaño Sagrado se le daba por muerto, pero en ese compromiso de vuelta aprovechó la expulsión de Álvaro Fidalgo para dar vuelta la serie, gracias a los tantos de Ronaldo Cisneros (minuto 18), Alan Mozo (75) y Jesús Orozco Chiquete (88). Por los de Coapa marcó Diego Valdés (56). El marcador global quedó 2-3 a favor de los rojiblancos.
El nacimiento de la rivalidad
Si bien es cierto que sus enfrentamientos datan de hace más de nueve décadas, la verdadera rivalidad entre ambas escuadras daría inició a finales de los años 50. Más precisamente, fue el 12 de noviembre de 1959 cuando el conjunto tapatío venció 2-0 a los azulcremas.
Este juego se llevó los reflectores, debido a que días antes el entrenador americanista (Antonio Marcos) habló mucho y se burló de los rojiblancos, puesto que en el más reciente encuentro los habían vencido 2-0. Fue en este momento, cuando el aficionado de los dos equipos se encargó de promover la rivalidad entre clubes, marcando las diferencias socioculturales de cada región. Junto a que este es un partido entre mexicanos y extranjeros.
Fiesta arruinada
Se disputaba el clásico del Torneo Apertura 2016 y las Águilas se disponían a celebrar su Centenario en el Estadio Azteca y frente a su público. Pero las Chivas tendrían pensado otro desenlace para esa jornada…
El equipo cambió el destino de la jornada con una actuación soberbia de Isaac Brizuela, quien marcó un doblete, mientras que el multicriticado Carlos El Gullit Peña se encargó finiquitar el marcador. Fue un sonoro 3 a 0 en favor de Chivas que en ese entonces era dirigido por el argentino Matías Almeyda.
Áreas blancas
Uno de los Clásicos Nacionales más inusuales se presentó en la temporada 1973-74. Lo más curioso es que para ese partido, la Liga MX decidió pintar las áreas de color blanco. Esta determinación causó expectativa entre los aficionados, que llenaron el Coloso de Santa Úrsula, pues fue algo precursor en México.
La victoria se la llevó Chivas por 0-1 en el Estadio Azteca con gol de Octavio Muciño. No fue el triunfo más recordado desde el juego, pero sí está claro que ningún otro partido después ha tenido la peculiaridad de las áreas pintadas de color blanco.
La volea de Bravo
Hay clásicos que tienen valor por las diferencias entre los equipos, por tratarse de una victoria agónica o alguna remontada épica. Pero también están aquellos que son valorados por una jugada puntual o, como en este caso, por habernos entregado un verdadero golazo. Para recordar esta victoria, nos trasladamos al Torneo Clausura 2007, que terminó con triunfo 2-1 de las Chivas.
El autor del gol icónico fue Omar Bravo. Uno de los máximos goleados en la historia del Guadalajara anotaría un golazo de volea que sorprendió a todos en el Estadio Jalisco. Este tanto no solo ratificó su calidad como delantero, sino que también consolidó su categoría de ídolo del cuadro rojiblanco.
Penaltis y polémicas
Un cierre caótico se vivió en el Clásico Nacional del Verano de 2002 en donde primero Gilberto Alcalá, árbitro del partido, marcó un polémico penalti en favor del América, pero después las Chivas tomaron la ventaja 2-3 en el juego y a punto de acabar cuando se dio una jugada en donde los azulcremas pudieron empatar.
Joel Sánchez selló la remontada rojiblanca sobre el América, que se había puesto en ventaja con los goles del chileno Iván Zamorano mediante penaltis. Las Chivas anotaron por medio de Ramón Morales y Héctor Reynoso la paridad, para que apareciera El Tibu Sánchez para erigirse como héroe ante un lleno de 114.500 aficionados en el Estadio Azteca. Sobre el cierre, un remate a la meta rojiblanca pegó en el poste y después la pelota pareció rebasar la línea… pero el árbitro descartó el gol.
Campeón de Campeones
Por su puesto, el enfrentamiento entre los dos más grandes colosos del futbol mexicano, tiene historia en distintas competencias del país (también en el ámbito internacional). En lo que respecta a la Copa Campeón de Campeones, Chivas y América se han enfrentado en dos ocasiones, mismas en las que los rojiblancos se han impuesto.
Los dos cruces se dieron en campañas consecutivas. La primera fue en la temporada 1963-64 y favoreció para los tapatíos por 2-0. La segunda se dio en la 64-65, con marcador a favor del chiverío por 2-1.
El puntapié de Robles
Otro triunfazo en el Azteca, pero que también es recordado por los incidentes que se vivieron en el cierre del partido. En el año 1992, el Rebaño se impuso 1-0 en el clásico con un gol de cabeza de Héctor del Ángel cuando promediaba la segunda parte, pero los ánimos acabaron demasiado caldeados.
Una vez que el árbitro pitó el final, comenzaron las riñas, principalmente a partir que Cuauhtémoc Blanco le tirara un puñetazo a Felipe de Jesús Robles, aunque el entonces lateral izquierdo lejos estuvo de amilanarse y respondió con un puntapié a las partes nobles del histórico número 10 americanista y estallando en llanto tras el coraje.
Golpe sorpresa
Esta serie es una de las más emocionantes que se han vivido en los últimos tiempos. Cuando el fútbol mexicano pudo reactivarse luego de la pausa provocada por la pandemia de COVID-19, Guadalajara y América se volvieron a ver las caras. Las Águilas llegaban como gran candidato, no solo a avanzar sino también a quedarse con el título en aquellos Cuartos de final de la liguilla del torneo Guardianes 2020.
Cristian Calderón fue el jugador más destacado: tres goles suyos resolvieron la serie. En la ida, el Chicote anotó un gol al minuto 80 en el Estadio Akron y en la vuelta le anotó otros dos golazos a Guillermo Ochoa en el Estadio Azteca, que significaron el triunfo 2 a 1 (3-1 en el global).
La playera del Tigre
En el Campeón de Campeones de la temporada 1963-64 celebrado en el Estadio Olímpico Universitario se originó una de las broncas más recordadas de la rivalidad entre los dos colosos del futbol mexicano. Y el gran responsable de esto fue Guillermo Sepúlveda.
El Tigre Sepúlveda, central del Guadalajara, salió expulsado, se quitó la camiseta y se la dejó en el césped a la banca americanista diciéndoles: “Con esta tienen para sentir miedo”, sus palabras calentaron a los jugadores azulcremas, lo que desató la trifulca. El juego terminó con una contundente victoria de 2-0 para Chivas.
Batalla en semifinales
La primera vez que se enfrentaron en partidos de eliminación directa fue en la temporada 1982-83. América llegó al Clásico en semifinales como el gran favorito. El equipo de Carlos Reinoso había roto todos los récords del club en una campaña espectacular. La ida la ganó por 2-1 en el Estadio Jalisco y parecía encaminado al título.
Los seguidores de las Águilas se dieron cita en el Estadio Azteca listos para vivir una fiesta viendo a su equipo superar al Rebaño, sin embargo, los dirigidos por Alberto Guerra ganaron por 3-0 en el Coloso de Santa Úrsula y se clasificaron a la final. Minutos antes que concluyera el compromiso, los ánimos se calentaron e integrantes de ambos equipos intercambiaron golpes por más de 10 minutos. Una campal que le costó a Chivas la suspensión de gran parte de su cuadro titular. Esto influyó para que después perdiera la Final en penales frente al Puebla.
Los 3-0 en el 2000
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Casualidad no, capacidad y contundencia sí. Tanto en el Torneo de Invierno como en el Verano de ese año, el Rebaño Sagrado le propinó la misma dosis al América con dos 3-0, con victorias en el Estadio Jalisco y en el Estadio Azteca.
Un año difícil de repetir en materia de clásicos y que los seguidores rojiblancos no olvidan. Las goleadas del 2000 quedaron en la retina de todos, sobre todo por el complejo momento que vivía el club. Para mala fortuna de las Chivas, en ninguno de los dos torneos alcanzó buenas actuaciones en las Liguillas, por lo que no se pudieron redondear estas actuaciones ante el acérrimo rival.
El día de los 7
Los tapatíos han logrado la más amplia goleada en la historia de los Clásicos. La mayor goleada registrada en el Clásico Nacional se dio en el ya lejano 1956. En aquella ocasión Chivas y América se enfrentaron en el Estadio Parque Oblatos y el marcador fue favorable para los locales por un histórico 7-0 en el Parque Oblatos.
Con goles de Crescencio Mellone Gutiérrez en tres ocasiones, Juan Bigotón Jasso, Isidoro Chololo Díaz, Chava Reyes y Raúl La Pina Arellano, el trámite fue un verdadero baile ante un América que no hizo pie en ningún momento. El encuentro correspondió a la temporada 56-57, torneo que a la postre resultó en el primer campeonato del campeonísimo.
Camino al título
Se disputaban las semifinales del Torneo Apertura 2006. El Guadalajara había entrado a esta Liguilla desde el repechaje. Por el pase a la final, se topó con el América y por fin pudo romper la mala racha. La historia dirá que la clasificación se definió en el encuentro de ida, gracias a un rotundo 2 a 0.
Los goles de Ramón Morales, de penal, a los 53′ y de Omar Bravo a los 60′, sirvieron para sacar una buena ventaja en la serie, ya que le bastó con un 0-0 en la Vuelta en el Estadio Azteca para dejar fuera a las Águilas. Posteriormente, Chivas ganaría su 11vo título al imponerse ante el Toluca en la gran final.
Humillación histórica
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El Clásico Nacional del Torneo Invierno 1996 es un partido que quedará marcado por siempre en la rivalidad de Rojiblancos y Azulcremas. De la mano de Ricardo Ferretti, Chivasconsiguió una goleada ante las Águilas dirigidas por Ricardo La Volpe que quedará para los libros de historia. El Rebaño Sagrado ofreció un recital a sus aficionados y elementos como Gabriel García y Ramón Ramírez fueron los protagonistas del compromiso.
Con doblete de García y goles de Ramírez, Sergio Chávez y Paulo César Tilón Chávez, Guadalajara venció a los de Coapa en el Estadio Jalisco. Después de esta goleada, la directiva de las Águilas cesó a La Volpe como técnico. La victoria logró que el Tuca se ganara el respeto y cariño de los aficionados, mientras que la derrota azulcrema provocó que el Bigotón perdiera su trabajo después de solo cuatro jornadas disputadas.
