Las Chivas de Guadalajara no se han quedado con los brazos cruzados y a pesar de que ya cuentan con los servicios de Efraín Álvarez y Richard Ledezma, es una realidad que necesitan de un zaguero central que cumpla con lo que necesita el entrenador, Gabriel Milito y por ello tienen en la mira a Diego Campillo.
Pero las negociaciones con los Bravos de Juárez se han alargado y mientras el conjunto fronterizo quiere al menos cuatro millones de dólares, el Rebaño Sagrado pretende dar a cambio a algunos futbolistas o pagar la mitad de lo que piden los dirigidos por Martín Varini.
Por ello el nombre de un canterano ha empezado a sonar como opción para Juárez y se trata de Diego Ochoa, un defensor que puede jugar como central o lateral y que ya debutó el torneo anterior con Oscar García, pero esto sería volver al mismo error por el que ahora quieren de regreso a Campillo.
“El caso del Benja Sánchez es también el de otro joven delantero promesa que no le han dado el salto al primer equipo. Ochoa es un lateral que ya debutó, pero no tendrá mucha actividad en el Rebaño. La cuestión por definir es si estos van en calidad de préstamo o ya de plano Chivas se desprende de ellos definitivamente”.
“Solo sería que pusieran mucho ojo en las cláusulas de las negociaciones, para que no les vuelve a pasar lo de Campillo. Porque esa película de vender jugadores y luego ir comprarlos más caros ya está muy vista en el Redil”, fue parte de lo que publicó la columna Sancadilla de Grupo Reforma.
Chivas le busca acomodo a Ricardo Marín
Otro de los jugadores que no entra en planes de Guadalajara es el atacante, Ricardo Marín, quien estuvo con Puebla la campaña pasada y ahora suena para enrolarse con Juárez, aunque no hay nada concreto por el momento. Marín llegó al Rebaño desde Celaya y sus actuaciones le alcanzaron para ser titular con Fernando Gago.