En Chivas de Guadalajara está empezando a crispar el interminable caso en la que está inmerso Jesús Orozco Chiquete. Cruz Azul lo tenía casi asegurado, pero un cambio en las condiciones de pago que quiere hacer la Máquina Cementera modificaron la situación. Desde la Ciudad de México iban a ejecutar la cláusula de rescisión, pero quisieron negociar con Chivas otra forma de pago.

A la hora de hacer valer una cláusula, solo se tienen que poner de acuerdo el club comprador con el jugador. El equipo que posee la ficha del futbolista no puede hacer nada, ya que es algo que se estipula en la firma del contrato. Sin embargo, en este caso Cruz Azul debe estar plenamente convencido del profesional al que está contratando, y no es solo por la cifra que está pagando.

Una condición que existe en la cláusula de rescisión es que el pago se debe hacer completo al momento en que se ejecuta. No hay opción de cuotas. Es por ese motivo que la Máquina Cementera quiso negociar con el Rebaño Sagrado un plan de pago en 3 partes, algo que en Guadalajara no aceptan.

Iván Alonso es el director deportivo de Cruz Azul. (Imago)

Según lo reportado por el periodista León Lecanda, Cruz Azul ofreció un plan de pago donde abonaba 6 millones de dólares ahora, 2.5 millones a mediados de 2025 y la misma cifra en diciembre. De esta manera se totalizaban los 11 millones de la cláusula de rescisión, pero repartidos en 3 cuotas.

El verdadero precio de Orozco Chiquete

En Chivas nunca quisieron desprenderse de Jesús Orozco Chiquete, por lo que negociar con Cruz Azul un plan de pago no fue una opción. Además, el pago de la cláusula contempla otro valor importante: los impuestos corren por cuenta de la Máquina Cementera.

Conforme a lo que reveló el citado comunicador, el precio final del defensor de 22 años sería de 15 millones de dólares. De ese monto, 11 millones terminarían completamente en las arcas del Rebaño Sagrado, por lo que para Cruz Azul es una operación muy costosa.