Elías Uribe, recordado en las Chivas como el "Profe Terry", dedicó más de 30 años al club Guadalajara y tras su salida hace un par de años decidió dar un paso adelante y continuar su carrera en el fútbol, aunque en los banquillos y lo consiguió, ahora dirige a su equipo en todos los aspectos.

El "Profe Terry" vio como se acabó una trayectoria de más de 30 años como utilero en el Rebaño Sagrado en 2017, pero esa decepción no lo derrotó y dos años más tarde cristalizó su sueño de volver, ahora como director técnico de los Diablos Rojos de Tesistán, club de la Quinta División y que no solo entrena, sino que también traslada en trayectos cortos. 

Uribe, en entrevista exclusiva a Mediotiempo, reconoció que "es Quinta División, trabajamos en Pumas Tesistán. Empezamos a echarle la mano, ayudando con los porteros, luego me metí a lo administrativo, luego ya era el dueño, luego yo pagaba las comidas, y es algo que me gusta, no lo veo extraño y le saco mucho provecho, estar en una institución ya sea Chivas, Atlas, Real Madrid, Barcelona, mientras lo hagas con mucho gusto es la institución más grande que puedes tener".

El ex utilero de Chivas, personaje reconocido en la localidad de Tesistán, añadió que "como yo les comento aquí a mis compañeros, a veces que me peguntan, a lo mejor no cursé el título en un aula del ENDIT, o el título por internet, pero mi título es un día a día por más de 30 años, en un vestidor, en una cancha, en un estadio, en situaciones totalmente adversas, en situaciones de gloria, en situaciones que mucha gente ni se imagina".

El "Profe Terry" reveló que "me apasiona mucho, pero después de estar 30, 32 años en un frenesí total se te acaba a veces el hígado, la saliva, la esperanza, se te cae el pelo, entonces yo le doy gracias a Dios que me dio la oportunidad que a esta edad poder ejercer algo que a mí me guste, que a mí me llama mucho la atención" y agregó que "me veo aportando para que la gente que viene de abajo, que yo le puedo sustentar para que ellos crezcan en cualquier aspecto, ahí me veo, porque al final del día ya me chingué más de 30 años, ahorita ya estoy más para aportar que para hacer".

Uribe confesó que "me quité un grillete de una presión de más de 30 años, donde yo si no había ropa tenía que sacarla, si no venía el señor de la lavandería yo tenía que tener la ropa limpia, si estaban los baños sucios y el intendente no vino yo lo tenía que hacer, si había que llevar un registro urgente a la Federación Mexicana, porque el jugador a las 12 de la noche ya no podía jugar, me mandaban a mí, fue algo que aprendí" y agradeció a Jorge Vergara de hablarle al momento de su salida.