El AEK Atenas ha dado un paso agigantado en su búsqueda del bicampeonato de la SuperLiga de Grecia. El equipo comandado por Matías Almeyda se impuso 1-0 sobre el Olympiakos en la segunda jornada de los Playoffs, en un duelo en el que los exjugadores de Chivas Orbelín Pineda y Rodolfo Pizarro tuvieron un día de contrastes, pues el primero fue titular y el segundo no fue ni siquiera convocado.
De esta manera, el equipo de la capital griega se ha asegurado la primera posición una semana más de manera notable, al ganar en el tiempo de descuento para mantenerse justo por delante del PAOK, su más cercano perseguidor y que logró imponer condiciones sobre el Panathinaikos.
Así fue el triunfo del AEK de Almeyda
El partido del cuadro Enosis vio numerosas oportunidades para ambos lados a lo largo del enfrentamiento , aunque ninguno de los equipos pudo encontrar el fondo de la red sino hasta el minuto 90 , cuando los suplentes del AEK , Petros Mantalos y Niclas Eliasson , se combinaron para marcar el gol que hizo estallar de júbilo a la afición del Águila de dos cabezas.
El resultado coloca a los de amarillo y negro con dos puntos más que el PAOK gracias a sus 65 acumulados, cifra que mantiene con vida el sueño ateniense por ganar trofeos de liga consecutivos. De lograrlo, el equipo del Pastor Almeyda conquistaría un anhelado bicampeonato, mismo que no consiguen desde hace exactamente 30 años.
Por el primer bicampeonato en 30 años
Fue en la temporada 1993-1994, cuando el Águila Bicéfala obtuvo títulos consecutivos por última ocasión en su historia. Aquella vez, el equipo Kitrinomavri conquistó su tercer cetro al hilo. Sin embargo, el conjunto Enosis entró a partir de ahí en una crisis deportiva que le impidió cosechar campeonatos hasta la temporada 2017-2018, 14 años después de ese tricampeonato, aunque al año siguiente no pudo refrendar su corona.
De esta manera, de la mano del último entrenador que pudo liderar a Chivas a un campeonato en la Liga MX, el AEK está cada vez más cerca de su primer bicampeonato en tres décadas. De conseguirlo, sin lugar a dudas, Almeyda incrementaría su ya de por sí vasto legado en el futbol de Grecia y acrecentaría ese palmarés que en Guadalajara nutrió a lo grande.