Contrario al intenso calor que ya se siente en la víspera de la primavera, las Chivas tuvieron un frío recibimiento a su llegada a la Ciudad de México para el partido de Vuelta de los Octavos de Final de la Concachampions ante el América, luego de la humillante paliza en la Ida por 0-3 que ha dejado la llave prácticamente resuelta.

La afición ha mostrado ya su hartazgo ante los malos resultados del club rojiblanco y por esta razón fue un recibimiento distinto al que suele tener el cuadro tapatío en la capital del país. El Guadalajara lo sabía y por eso mismo evitó los reflectores.

Desde Toluca en camión y la molestia de la afición

Ya de por sí el itinerario no era propicio para un recibimiento como el de hace poco más de una semana para el duelo ante Cruz Azul, pues el Rebaño Sagrado se vio obligado a llegar a la capital desde el Aeropuerto de Toluca, ya que la saturación del Aeropuerto Internacional de la CDMX, promueve a que todos los vuelos chárter aterricen en los aeropuertos aledaños. 

Por ello no fue contemplada una bienvenida masiva como de costumbre. Además de que una desventaja de tres goles y la necesidad de una proeza para acceder a la siguiente ronda del certamen internacional, hubiera generado críticas, protestas y abucheos por parte de ese sector molesto de la afición.

Pese a todo, planean serenata

De esta forma, pasadas las 20:00 horas, el camión que trasladó a todos los integrantes de la convocatoria de Fernando Gago, llegó a su hotel de concentración en San Jerónimo. Ahí, la afición brilló por su ausencia, por lo que el transporte ingresó por la puerta trasera en medio de un ambiente lúgubre y frío.

Todavía algunos grupos de animación de las Chivas convocaron a la afición para una serenata para esta noche, pues ellos representan la otra cara de la moneda, ese sector de la fanaticada que está incondicionalmente, siendo ambas posturas tan válidas como respetables.