Chivas Femenil encara el Clausura 2026 con un panorama distinto al de torneos anteriores. A diferencia de mercados pasados, donde la planeación fue motivo de críticas y descontento entre la afición, esta vez la directiva rojiblanca decidió invertir y reforzar la plantilla de manera clara, enviando un mensaje contundente: el equipo está obligado a competir en serio por el título de la Liga MX Femenil.
En ese contexto, la figura de Nelly Simón aparece como eje central. La directora deportiva, que durante varios semestres fue duramente cuestionada, incluso con pedidos públicos de salida, parece haber entendido el reclamo: Chivas no podía seguir siendo un equipo competitivo en la fase regular, pero inofensivo en Liguilla. El Clausura 2026 marca, hasta ahora, su mercado más ambicioso al frente del proyecto.
Cuatro refuerzos que cambian el escenario
A diferencia de mercados anteriores, marcados por incorporaciones de bajo impacto o apuestas a futuro, Chivas Femenil sumó cuatro refuerzos que elevan el nivel inmediato de la plantilla, tanto por recorrido como por experiencia en la Liga MX Femenil.
La incorporación más resonante es la de Cristina Ferral, defensa central proveniente de Tigres Femenil. Multicampeona, referente en vestidor y habituada a jugar instancias decisivas, su llegada representa un salto de jerarquía en una zona que históricamente le generó problemas al Rebaño. No solo aporta solidez defensiva, sino también liderazgo y mentalidad ganadora, un aspecto que suele marcar diferencias en Liguilla.
En ofensiva aparece uno de los fichajes más significativos del mercado: Jasmine Casarez, delantera histórica de FC Juárez Femenil. La atacante llega a Guadalajara como máxima goleadora en la historia del conjunto fronterizo, con 47 goles, un registro que habla de regularidad, peso ofensivo y capacidad para asumir responsabilidades en ataque. Su arribo responde a una necesidad clara: dotar al equipo de mayor contundencia y de una futbolista capaz de marcar diferencias en partidos cerrados, algo que Chivas ha sufrido en fases finales.
Otro nombre importante es el de Mayra Pelayo, proveniente de Xolos Femenil, una apuesta que combina presente y proyección. Aunque su llegada se dio en medio de un proceso de recuperación, la directiva decidió avanzar igualmente por su fichaje, lo que refleja una planificación a mediano plazo y confianza en su calidad para convertirse en una pieza determinante cuando esté en plenitud física.
El cuarto refuerzo es Eva González, mediocampista con experiencia en la Liga MX Femenil, que se suma para ampliar variantes en una zona donde el equipo solía quedar corto en recambios. Su incorporación apunta a elevar la competencia interna, sostener el nivel a lo largo del torneo y darle más herramientas al cuerpo técnico en contextos de alta exigencia.
