Javier Eduardo López, mediocampista de las Chivas de Guadalajara, fue el protagonista de un curioso episodio -casi paranormal- ocurrido este miércoles durante la derrota 1-0 ante Xolos de Tijuana en el Estadio Akron, en el que la afición y los jugadores rojiblancos celebraron una falsa anotación en una jugada de tiro libre.
El volante ofensivo del Rebaño Sagrado, quien ingresó tras el descanso del medio tiempo en sustitución de Alan Cervantes, fue revulsivo en el ataque rojiblanco y a los 86 minutos del paritod tuvo una ocasión inmejorable para igualar la pizarra en el Gigante de Zapopan.
“Chofis” López pateó el balón, superó la barrera y se dirigió al primer poste del arco defendido por Gibrán Lajud, pegó de la red por lado de afuera de la portería, pero entonces algo poco visto ocurrió. El esférico rompió la red, cayó dentro del arco visitante y por ello, la afición, jugadores, incluso hasta Christian Martinoli y Enrique “Perro” Bermúdez, relatores del encuentro para la cadena internacional TUDN, gritaron este gol “fantasma”.
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Eduardo López y otros jugadores rojiblancos se quedaron estáticos sin saber qué había sucedido, pero Jesús Molina, capitán del Rebaño Sagrado, tomó el balón del fondo de la portería y festejó. Al ver que el árbitro Óscar Mejía señaló saque de meta, reclamó airadamente. El silbante recurrió al monitor de apoyo del videoarbitraje (VAR) para cerciorarse de la situación y mantuvo su decisión de saque de meta. Un gol “fantasma”, digno de este Halloween.
