Las Chivas de Guadalajara sufrieron una estrepitosa caída en condición de local, ante Tigres UANL. De más está decir que con un marcador de 0-4, la actuación defensiva lejos estuvo de ser convincente. El Rebaño comenzó perdiendo y poco a poco se desdibujó sin poder crearle demasiado peligro a su rival, que en el complemento, con la jerarquía desde el banco de suplentes, logró ampliar la ventaja.
Los dirigidos por Veljko Paunovic atraviesan un momento de mucha irregularidad en el Apertura 2023. Parecía que las victorias ante Atlas, en el Clásico Tapatío, y ante Puebla, hacían olvidar el mal momento del equipo, que llegó a estar seis encuentros sin conocer la victoria. No obstante, en el choque ante Tigres UANL, quedó claro que el Rebaño se encuentra lejos de su mejor versión y tiene mucho por mejorar si pretende pelear por el título.
Tigres no sólo controló con facilidad los ataques rojiblancos, sino que también pudo lastimar y aprovechar los errores defensivos del Rebaño. En la primera mitad, la zaga central dudó y Luis Quiñones habilitó a Nicolás Ibáñez, quien quedó sin marca para batir a Miguel Jiménez. En el complemento, otra vez los fallos de la última línea fueron suficientes para que los Felinos vieran portería.
El grosero fallo de Alan Mozo en el segundo gol de Tigres UANL
En el segundo tiempo, Chivas intentaba acorralar a su rival contra su arco, luego del ingreso de Ronaldo Cisneros para cargar el área. Sin embargo, en una distracción, Tigres encontró el segundo gol por intermedio de un gran remate de Nicolás Ibáñez, desde la frontal del área. Segundos antes antes de que el centrodelantero quedara de frente al arco, se produjo un claro fallo de Alan Mozo, quien fue regañado por su compañero Antonio Briseño.
Mientras los dos equipos se disputaban el balón en el lado izquierdo del campo, donde Alejandro Mayorga perdió su duelo, Alan Mozo fue un mero espectador más. El lateral derecho se durmió durante varios segundos y no dio el paso al frente para adelantar la última línea, achicar los espacios y provocar la posición adelantada de los atacantes.
Al no dar Mozo ese paso adelante, Luis Quiñones pudo desmarcarse al espacio sin quedar en offside, para luego tocar hacia adentro, donde esperaba Nicolás Ibáñez. Apenas el balón tocó la red, Antonio Briseño le reclamó al lateral derecho por dormirse en pleno ataque de la visita y habilitar al atacante colombiano.
Wacho Jiménez poco pudo hacer
Aunque el guardameta de Chivas, Miguel Jiménez, suele ser atacado por la afición rojiblanca, esta vez el Wacho tuvo poco que hacer en los cuatro goles de Tigres UANL. El primero se da desde muy cerca y le pasa por entre las piernas; Ibáñez y Lainez sacaron potentes remates con buena dirección, mientras que en el último, Marcelo Flores también llegó de frente y le ganó el duelo a Chicote Calderón para enganchar muy bien el balón y decretar el 0-4.
