El gol de Diego De Buen para Puebla ante Chivas en el Estadio Akron puso fin a una racha rojiblanca de 270 minutos con la valla invicta. Más tarde llegó un tanto más de la Franja que puso en aprietos al Rebaño. Sin embargo, la solidez defensiva vista en los encuentros anteriores era algo que Fernando Gago añoraba desde hacía mucho tiempo.
El regreso de Gilberto Sepúlveda a la zaga central puede ser considerada una de las claves para la mejora de Chivas en el aspecto defensivo. El Tiba comenzó como titular en el Clausura 2024, llamado a ser un elemento importante para el ciclo del nuevo entrenador. Sin embargo, en la Jornada 4 ante Toluca, sufrió un choque con Mateo Chávez que lo marginó por una fractura de pómulo.
Tras varias semanas fuera del campo, Sepúlveda regresó para un momento clave del semestre: el Clásico Nacional de Liga MX ante América. El Rebaño venía de caer eliminado en la Concachampions ante las Águilas, además de dos derrotas consecutivas en el certamen liguero, frente a Cruz Azul y León. Fue cuando más riesgos corrió el ciclo de Gago.
Tiba y Chiquete le han dado solidez a Chivas
El regreso del Tiba Sepúlveda sin duda que le aportó firmeza a la última línea rojiblanca. Ante América jugó como zaguero izquierdo pero luego ya volvió a ser el primer marcador central, junto a Chiquete Orozco a su lado. Ese dúo fue clave para la racha de 270 minutos sin recibir goles.
Además, cabe destacar que esa dupla fue la misma que utilizó Veljko Paunovic para llegar hasta la gran final del Clausura 2023. Aunque en esa oportunidad muchas veces Chiquete se corrió a la banda izquierda para que Antonio Briseño ocupara un lugar en la zaga. Ahora, el “Pollo” es el principal perjudicado con el regreso de Sepúlveda, pues ha perdido su lugar en el once titular.