Alan Mozo es uno de los jugadores completamente descartados en el proyecto de Gabriel Milito, al grado de que, a diferencia de otros futbolistas a los que la directiva les está buscando salida como Gilberto Sepúlveda, el lateral derecho ni siquiera viajó a la pretemporada en Barra de Navidad. Aunque hasta ahora no se ha informado sobre una oferta formal y convincente por parte de otro club, todo apunta a que el propio Mozo ya tendría claro cuál será su futuro.
De acuerdo con lo que comenzó a circular en redes sociales, Alan Mozo ya se habría despedido del staff de Chivas, dándoles a entender que su etapa en el Guadalajara está llegando a su fin. Esto se desprende de una fotografía publicada por uno de los trabajadores del club, Misael García, en la que aparece junto al futbolista acompañada de emojis suspirando, un gesto que muchos interpretaron como una despedida anticipada.
En días recientes, el periodista Alberto Bernard explicó que Mozo ha sido ofrecido a varios equipos de la Liga MX, aunque sin éxito hasta el momento. El principal obstáculo sigue siendo el alto salario que percibe el jugador, una cifra que muy pocos clubes del futbol mexicano están dispuestos o en condiciones de asumir. Hasta ahora, no hay reportes de algún equipo que haya levantado formalmente la mano por el lateral.
Mientras se define su situación, Alan Mozo continúa entrenando en Verde Valle, con el objetivo de mantenerse en buena forma física en caso de que llegue una oferta de último momento. Si su salida no se concreta, podría repetirse un escenario similar al que vivió Isaac Brizuela el torneo pasado: entrenar con el primer equipo, pero tener actividad únicamente con la Sub-21 del Rebaño Sagrado.
A Alan Mozo le quedan dos años y medio de contrato y puede exigir que se le respete
El contrato de Alan Mozo con Chivas finaliza hasta el verano de 2028, por lo que aún le restan dos años y medio ligados al club. Esta situación también complica cualquier negociación, ya que el jugador está en todo su derecho de exigir que se respete su contrato. Con tanto tiempo por delante, Mozo puede darse el lujo de esperar un proyecto que realmente lo convenza tanto en lo deportivo como en lo económico, mientras Chivas sigue intentando resolver un caso que se ha convertido en un verdadero dolor de cabeza.
