Chivas firmó un Apertura 2025 bastante positivo y, con total confianza en el proyecto deportivo de Gabriel Milito, la directiva busca reforzar al equipo conforme a las peticiones del estratega argentino. Al mismo tiempo, el plan contempla una reestructuración profunda del plantel, con hasta 10 bajas en los próximos días, de las cuales ya están confirmadas las salidas de Javier Hernández y Cade Cowell.
Sin embargo, el principal obstáculo para que lleguen los refuerzos deseados no está en lo deportivo, sino en lo financiero. De acuerdo con el periodista Alberto Bernard, el mayor problema para Chivas es que varios de los jugadores que no entran en planes de Milito tienen sueldos muy altos, lo que dificulta encontrarles acomodo y liberar masa salarial para nuevas contrataciones.
En su análisis, Bernard recuerda que Chivas debe garantizar el salario de los jugadores que aún tienen contrato, incluso si salen a préstamo. Casos como los de Alan Mozo o Erick Gutiérrez ejemplifican el problema: perciben sueldos imposibles de cubrir para clubes modestos, pero su nivel actual tampoco los hace opciones atractivas para los equipos más poderosos de la Liga MX, complicando seriamente su salida.
A pesar de este escenario, el Guadalajara ya logró cerrar las incorporaciones de Brian Gutiérrez, Ángel Sepúlveda y Ricardo Marín. No obstante, si el club pretende seguir reforzando el plantel, la prioridad absoluta deberá ser concretar las salidas de los futbolistas que no entran en planes del cuerpo técnico y que representan un problema financiero para la institución.
A Chivas le urge cerrar a un defensa central y podría ser el último refuerzo por ahora
La directiva rojiblanca continúa moviéndose en el mercado invernal y el fichaje de un defensa central sigue siendo una prioridad. Sin embargo, no se descarta que no haya más altas hasta que se confirmen bajas importantes, una situación que podría complicar no solo este periodo de transferencias, sino también el mercado de verano de 2026 si no se soluciona a tiempo.
