El nombre de Javier Hernández nunca pasó por debajo de la mesa en las Chivas de Guadalajara. Hijo del Chicharo Hernández y nieto de Tomás Balcázar, leyenda del club tapatío, la atención estuvo sobre él desde que empezó a despuntar en las Fuerzas Básicas del Rebaño Sagrado, donde empezó a destacar.

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La oportunidad llegó para el Chicharito el 9 de septiembre de 2006, en el Torneo Apertura de dicho año, cuando José Manuel De La Torre le dio ingreso frente al Necaxa. El debut del delantero fue soñado, pues al minuto 83 logró anotar su primer gol como profesional y logró dar comienzo a una prolífica carrera.

En ese campeonato no anotó más y las siguientes temporadas fueron a un ritmo goleador muy paulatino hasta que llegó el gran destape: fueron 21 tantos en el campeonato mexicano y eso le valió el pase al fútbol europeo con el Manchester United y luego de eso defendió las playeras de Real Madrid, Bayer Leverkusen y actualmente en el West Ham.