Veljko Paunovic llegó oficialmente al banquillo de Tigres. El propio club confirmó por la mañana la contratación del serbio como su nuevo entrenador, quien por la tarde llegó a Cancún para sumarse a la pretemporada con su nuevo plantel. El ex director técnico de las Chivas se ha convertido en el sucesor del uruguayo Robert Dante Siboldi, en la que será su segunda experiencia en la Liga MX.

El nacido en Macedonia del Norte, dirigió al Guadalajara durante un año, mismo en el que llevó hasta la Final de su primer torneo, al caer precisamente ante los felinos de la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL). Pauno llegó acompañado de sus mismos tres auxiliares: Nuno Miguel Gomes Bentes de Portugal, Claudio David Arseno Pessuto, argentino-español, y Quinton Fortune, de origen sudafricano.

La versión de Tigres con Paunovic, ¿más versátil?

Veljko intentará imprimir un estilo de juego sumamente versátil como el que por momentos se alcanzo a ver en el Rebaño Sagrado, con un 4-3-3 donde el 5 sostiene buena parte del peso defensivo para dejar con libertad a los interiores. Dicha identidad adquirirán los de la UANL, cuyo plantel plagado de veteranos deberá adaptarse a es nuevo ritmo.

Es por ello que para el exentrenador Mario Carrillo, Paunovic tendrá una tarea difícil en su nueva experiencia con el conjunto de la Sultana del Norte, pues ese dinamismo mostrado con el Guadalajara, podría ser difícil trasladarlo a un equipo longevo en ciertas zonas como es el de Tigres.

¿Qué dijo Mario Carrillo sobre Veljko Paunovic?

“Si algo tenía Guadalajara era dinámica, históricamente Chivas siempre ha tenido mucha dinámica. Los llevó a la final, un gran logro de Paunovic, pero para jugar al ataque le cuesta un montón; creo que le va costar”, avisó El Capello en Futbol Picante de ESPN.

El serbio de 46 años evaluará su plantilla para decidir si prescindirán de los servicios de algunos y pedirá a otros fichajes. Según han dicho, podría buscar los servicios de Nene Beltrán, Piojo Alvarado y un defensa, todos ellos gente de su confianza tras su paso por el chiverío.