Además de tratarse de un encuentro muy importante para ambos equipos y de haber marcado el regreso de Chicharito Hernández, el duelo entre Chivas y Pumas por la Jornada 8 tenía varios ingredientes especiales. Uno de ellos, el retorno de César Huerta al Estadio Akron, luego de su polémica celebración durante la Liguilla pasada, en Ciudad Universitaria.
Aunque es canterano del Rebaño Sagrado, como remarcó en la semana Jesús Orozco, César Huerta no se fue bien de la institución rojiblanca, donde no logró mostrar toda su calidad. El Chino encontró su sitio en Pumas UNAM, ya que allí tuvo grandes actuaciones e incluso se metió en la consideración de la Selección Mexicana, lugar en el que también mostró un buen rival.
Huerta venía de encender los ánimos de la afición y hasta de sus propios excompañeros, luego de la polémica playera que utilizó para celebrar un gol ante Chivas, con la leyenda de “Re-hecho en CU”. Aunque en esta oportunidad advirtió que no repetiría dicho festejo, tampoco hizo falta, pues el Rebaño se impuso con autoridad y el Chino, que fue suplente, esta vez no pudo convertir.
El cántico de la afición para Chino Huerta
Ya en su última visita al Estadio Akron, Huerta había sido víctima de abucheos y silbidos en casi cada contacto que tenía con el balón. Estaba claro que su recibimiento iba a ser algo tenso, mucho más aún después de la polémica y provocadora playera que utilizó para burlarse de Chivas.
Sin embargo, lo que no se podía advertir era que habría hasta un cántico especial para el antiguo canterano. Al momento en que Huerta salió del banquillo para realizar la entrada en calor, las gradas del Estadio Akron lo recibieron de mala manera: “Chino, Chino, ch**gas a tu madre” fue el grito que entonó la afición rojiblanca.
Chino Huerta terminó humillado por el Piojo Alvarado
Como si no alcanzara con la derrota de su equipo, los pocos minutos que jugó y el cántico que le dedicaron, Chino Huerta terminó siendo humillado por Roberto Alvarado. En el tercer gol del Rebaño, el Piojo desbordó y estuvo lúcido para hacer pasar de largo a Huerta, antes de lo que fue el gol de Víctor Guzmán.