El tercero de los duelos entre Chivas y América fue el más chato e igualado. Fernando Gago y André Jardine se estudiaron bien el uno al otro luego de dos enfrentamientos muy distintos entre sí. Como resultado se dio un 0-0 con pocas emociones en el que ninguno arriesgó demasiado cuando se acercaron los minutos finales.

La obligación estaba más del lado del Rebaño Sagrado, que logró cambiar su imagen gracias a la victoria obtenida entre semana en el Estadio Azteca. Sin embargo, América cuenta con jerarquía y un funcionamiento ya muy sólido, al cual le agregó la concentración que no tuvo en la vuelta de la Concachampions.

A continuación repasamos algunos motivos por los que Chivas y América, en definitiva, igualaron sin goles por la Jornada 12 del Clausura 2024.

Las razones del empate entre Chivas y América

Tantos enfrentamientos terminaron en paridad y desgaste físico. Al verse las caras por tercera vez en un lapso de diez días, Chivas y América se conocieron, se estudiaron y supieron bien dónde estaban sus virtudes y defectos. Las Águilas fueron levemente superiores gracias a la jerarquia de su plantilla, pero no pudieron abrir el marcador y fueron perdiendo ritmo conforme pasaron los minutos.

De tanto enfrentarse, Gago y Jardine aprendieron a neutralizarse el uno al otro (Imago7)

El América no volvió a confiarse tras lo ocurrido en el Azteca. Los de Jardine salieron con otra actitud después de la derrota entre semana. Tomaron nota y afrontaron el partido con seriedad, a sabiendas de que Chivas podía envalentonarse y volver a hacerles daño.

Gago repitió su plan y controló a Dos Santos y Fidalgo. El entrenador argentino mantuvo a Roberto Alvarado en el carril central, siendo el encargado de seguir personalmente los movimientos de Álvaro Fidalgo. Esa persecusión, sumada a la de Fernando Beltrán sobre Jonathan Dos Santos, le quitó juego a las Águilas, que buscaron un juego más directo.

El Piojo volvió a estar encima de Fidalgo, el cerebro americanista en la mitad del campo (Imago7)

Tala Rangel tuvo su mejor partido desde que debutó. El joven portero rojiblanco puede presumir de haber sido la gran figura del Clásico Nacional, donde fue factor para que Chivas pudiera mantener la valla invicta. Justo cuando muchos pedían a Óscar Whalley, el canterano se lució con varias intervenciones en las que transmitió mucha seguridad.

La lesión de Diego Valdés le quitó vuelo a las Águilas. Es sabido que el mediapunta chileno es una de las grandes figuras que tiene el América. Por eso, cuando se echó al suelo y pidió el cambio, en Chivas sabían que era una buena noticia y sintieron alivio, pues éste era uno de los jugadores que mejor sabía por dónde aparecer libre para generar peligro.

La lesión de Valdés afectó mucho al América (Imago7)

Chivas se enfocó en neutralizar pero careció de peligro. A diferencia de lo que ocurrió en el Estadio Azteca, el Rebaño no contó con la amenaza que tuvo días atrás. El desgaste físico se sintió en el complemento, como así también la falta de alternativas de primer nivel. Aunque no faltó intensidad para ir por los duelos, sí careció de creatividad y desequilibrio en campo rival.