La noticia sorprendió a todo el entorno del futbol mexicano: el Clásico Nacional entre Chivas y América, correspondiente a la Jornada 8 del Apertura 2025, se jugará el viernes 12 de septiembre a las 19:00 horas. No es un error de calendario ni una modificación menor: se trata de una decisión poco común en la historia reciente del partido más importante del país.
En redes sociales y espacios deportivos, no fueron pocos los que cuestionaron la modificación, interpretándola como un intento de restarle importancia al Clásico Nacional. “¿Qué sigue? ¿Jugarlo un lunes por la tarde?”, ironizaron varios usuarios, mientras otros apuntaban directamente contra la Liga MX y los intereses de las televisoras. ¿Por qué alterar el horario estelar del sábado por la noche que siempre ha acompañado a este encuentro?
La explicación oficial nunca llegó, pero la verdadera razón detrás de esta inusual decisión podría estar en que el sábado 13 de septiembre, al día siguiente del Clásico, se celebrará la pelea de Canelo Álvarez vs. Terence Crawford, un evento deportivo de alcance global que se transmitirá en horario estelar.
Todo indica que, para evitar que ambos eventos se empalmen y se resten audiencia mutuamente, se tomó la determinación de adelantar el Clásico Nacional un día. Esto confirma lo que muchos ya sospechaban: la televisión y el negocio volvieron a imponerse por sobre lo deportivo. La pelea del boxeador tapatío atrae grandes audiencias tanto en México como en Estados Unidos, por lo que las cadenas involucradas preferirían evitar que los dos eventos compitan entre sí.
Malestar en la afición de Chivas al poner el Clásico en un “viernes botanero”
Sin embargo, eso deja al Clásico en una posición incómoda: fuera de su horario tradicional, en un viernes laboral, lo que podría afectar la asistencia al estadio y alterar la rutina de millones de aficionados. Para la afición de Chivas y América, el cambio no cayó nada bien. Algunos incluso lo interpretaron como un símbolo del momento que atraviesa el fútbol mexicano, donde las decisiones se toman cada vez más desde los escritorios y menos en el césped.