Las Chivas de Guadalajara, uno de los clubes más grandes y queridos de México, ha tenido dificultades para cerrar fichajes en los últimos años. A pesar de la demanda constante de la afición por nuevas incorporaciones, el club ha demostrado que no tiene los recursos suficientes para contratar a grandes figuras. ¿Pero cuál es la razón detrás de esta situación?
Una posible respuesta se encuentra en la incapacidad que arrastra el club para vender jugadores. En el fútbol moderno, la venta de jugadores es una fuente crucial de ingresos, especialmente para aquellos que buscan fichar a nuevos talentos para mejorar sus respectivas plantillas. Sin embargo, es evidente que en los últimos años Chivas ha vendido muy poco.
Si no se vende, no se compra
Para encontrar las últimas grandes ventas rojiblancas hay que remontare muy atrás en el tiempo. En la temporada 2019/20, Alan Pulido fue transferido al Sporting Kansas City a cambio de 8,6 millones de dólares. Anteriormente, Orbelín Pineda se fue a Cruz Azul por 10,5 millones en la temporada 2018-19, misma en la que Rodolfo Pizarro se marchó a Monterrey por 14,5 millones y Carlos Salcedo al Eintracht por 5 millones.
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Aquellas ventas quedan ya lejanas y explican la falta de dinero que tiene el Rebaño para ir en busca de nuevas figuras. Durante la era de Fernando Hierro como director deportivo, se concretaron algunas transferencias, pero las mismas fueron por poco dinero. Entre ellas se encuentran Alejandro Mayorga a Necaxa, Alexis Vega a Toluca, Ángel Zaldívar a Juárez y Jesús Godínez a NT Zhiyun.
Los fichajes se escapan por falta de dinero
Esta falta de ventas sin dudas limita la capacidad de Chivas para competir en el mercado de fichajes. Recientemente, el club perdió la oportunidad de fichar a Andrés Montaño, mediocampista del Mazatlán que jugará en Cruz Azul. En mercados anteriores sucedió lo mismo cuando se buscó fichar a centrodelanteros como Guillermo Martínez, Alan Pulido y Brandon Vázquez.
Ahora, de cara al Apertura 2024, el Rebaño se enfrenta a la misma situación, pues además de perder a Montaño a manos de Cruz Azul, pretende a futbolistas muy costosos. Érick Sánchez del Pachuca, Sebastián Córdova de Tigres y Jesús Gallardo de Monterrey aparecen en carpeta, pero estos clubes pretenden grandes sumas de dinero que complican las esperanzas rojiblancas.
En resumen, la incapacidad de Chivas para vender jugadores ha afectado su capacidad para fichar nuevos talentos. A menos que el club pueda encontrar una manera de vender a sus futbolistas por sumas significativas, es probable que siga enfrentando dificultades en el mercado de fichajes.
