Si ha habido un tema de conversación candente en Chivas de Guadalajara durante los últimos días, han sido los refuerzos. La falta de contrataciones de jugadores de abolengo ha pegado fuerte a los aficionados, que esperaban a por lo menos un fichaje bomba que pudiera marcar esa diferencia que el Rebaño Sagrado le faltó la temporada anterior para poder aspirar al título de la Liga MX.

A Verde Valle llegaron Omar Govea, Bruce El-Mesmari, Daniel Aguirre y Fidel Barajas durante este verano, nombres que contrastan con los que hace unos meses retumbaban en los pasillos del equipo como posibles fichajes. Jesús Gallardo, Chiquito Sánchez o Jordi Cortizo parecían acercarse a la disciplina de Fernando Gago, pero los dos primeros ya están en Toluca y América respectivamente, mientras que el último es la gran esperanza aún viva.

Govea y Barajas ya debutaron con Chivas

Por lo pronto, el chiverío ha tenido que conformarse con los futbolistas elegidos por la directiva para este torneo. Tanto Govea como Barajas ya han hecho su presentación oficial en la Jornada 1 del torneo Apertura 2024 ante los Diablos Rojos. El mexicoestaodunidense ingresó al minuto 79 en sustitución de Cade Cowell, mientras que el exRayados lo hizo a los 87 en lugar de Piojo Alvarado.

Según el portal especializado Sofascore, Govea tuvo una calificación de 6.4 en su primera experiencia como rojiblanco, mientras que Barajas consiguió un 6.5. Más allá de la frialdad de los números, al juvenil de 18 años se le vio participativo, pegado a la banda partió desde ahí para generar peligro e incluso pudo disparar a gol, aunque Tiago Volpi detuvo fácilmente la pelota. Govea, a su vez, estuvo solo ocho minutos en el campo, donde ayudó a la recuperación de la esférica y repartió interesantes pases a sus compañeros.

No costaron baratos, por ello deben rendir

Por Barajas se pagaron 4 millones de dólares, mientras que Govea costó 2.5 millones, precios que parecerían no ser tan elevados, pero que deberán justificar si es que no quieren seguir a la sombra de los refuerzos que el Rebaño dejó escapar en el mismo mercado en que los contrataron.