Con un uniforme holgado y colorido, de esos que en la actualidad han vuelto a ponerse de moda pero bajo el nombre de oversized, los porteros de la década de los 90 eran personajes de culto. En México, nombres como el de Jorge Campos, Adolfo Ríos, Adrián Martínez, Óscar Pérez, Oswaldo Sánchez o Erubey Cabuto, destacaban por su enorme talento, por lo que la Selección Mexicana de Futbol tenía opciones de sobra para ocupar esa posición.
Además de ellos, Martín Zúñiga era otro guardameta que destacaba con las Chivas de Guadalajara, quienes le dieron una vitrina inigualable, misma que le dio mucha más visibilidad, al grado que después de ser campeón del torneo Verano 1997, fue convocado por Manuel Lapuente para la Copa América de Bolivia. Sin embargo, al Pulpo no le alcanzó para formar parte de la lista final para la Copa del Mundo Francia 1998, donde el entrenador se decantó por Campos, Conejo y Oswaldo.
Pulpo Zúñiga cree que podría ser titular con el Tri actualmente
Zúñiga Hernández disputó con el Rebaño Sagrado un total de 103 partidos, en los cuales recibió 128 goles y mantuvo su portería intacta en 26 ocasiones, números sumamente destacados que en la actualidad, le servirían sin duda alguna para pelear —incluso con mayor oportunidad que su tiempo— por un lugar en el Tricolor, donde apenas despuntan Tala Rangel del Rebaño Sagrado, Luis Malagón del América y Álex Padilla del Athletic Club, luego de varios años sin grandes opciones entre las nuevas generaciones.
“Sí, creo que tendría oportunidad ahorita (de ir al Tri), definidamente. Salían camadas y camadas de porteros. Yo arranco a jugar cuando estaba todavía Adrián Chávez, Nicolás Navarro y mi ídolo Pablo Larios. Crecí admirándolo y después cómo es la vida que me tocó jugar una Final en contra de él. Estaba muy peleado (el puesto), en mi mejor momento, dependes del entrenador”, dijo Pulpo Zúñiga a Rebaño Pasión.
“Tienen sus hombres de confianza que es válido y uno lo debe de entender. Te ilusionas con estar en la Selección. Todos los que juegan en Primera División deben soñar en eso. El futbolista siempre debe tener la ilusión de estar en la Selección, esté en el momento que esté. Hay que trabajar para ello y después ya dependerá de los demás”, añadió.
El dardo a Paco Memo Ochoa del campeón con Chivas
Paco Memo Ochoa emergió a principios de este siglo como la gran promesa de la portería en México. Su crecimiento fue tal que se adueñó de la titularidad con México al grado de haber acudido a cinco mundiales, siendo uno de los tres porteros junto al también azteca Tota Carbajal y la leyenda italiana Gianluigi Buffon. El problema es que esa hegemonía tan prolongada, cortó varios procesos de otros jóvenes, según analizó Zúñiga.
“Tiene mucho que ver, que va de la mano que hemos tenido a un portero que ha estado en el arco de la Selección durante cinco mundiales, es difícil que los que vienen abajo se catapulten. Si tomas en cuenta que la gran camada de Ochoa se mantuvo hasta los 40 años, Talavera y Corona todavía están. No hubo espacio para los demás. En la portería a diferencia de otras posiciones, no es fácil. Siguieron dando resultados ellos, el tema generacional se debe dar orgánico, porque viene un tipo atrás que va a cubrir el hueco que dejaron. Como sucedió con Campos, después con Oswaldo, que pudo haber seguido otros años más en la Selección”, abundó el ahora analista de Fox Deportes y Apple TV.
¿Puede Ochoa aspirar a otro Mundial?
Para El Pulpo, un regreso de Ochoa con Javier Aguirre no es descabellado, ya que el Mundial es un torneo fugaz y la longevidad pasa a segundo plano, sobre todo en esa posición. Sin embargo, cree que esta nueva camada de guardametas tiene talento suficiente para hacer el recambio generacional con la certeza de dejar el marco tricolor en buenas manos.
“Con quien te sientes a gusto. El entrenador va a poner al portero que le da la confianza de dejarle la responsabilidad. El Mundial es un torneo de tres partidos. Ochoa ha tenido grandes actuaciones, pero en un Mundial México juega tres o cuatro. Pasa rápido, son menos de 15 días. No es que vas a llevar un portero grande para un torneo de seis meses. Eso les trae mejor oportunidad. Ha sucedido con El Conejo, Ochoa, Oswaldo, Corona. México a lo mucho en un Mundial le tocaba jugar cuatro partidos desafortunadamente”, sentenció.