Por las Chivas de Guadalajara han pasado varios elementos con talento envidiable que no sólo se encargaban de anotar, sino también de hace que el equipo fuera hacia el frente y cuando los partidos se empezaban a tornar más complicados, aparecián con esa magia para marcar goles increíbles.
Desde Sabas Ponce, hasta Adolfo el “Bofo” Bautista, el Rebaño Sagrado ha consolidado las carreras de varios elementos importantes que marcaron su propia historia gracias a sus soberbias actuaciones que los enmarcaron dentro de los mejores futbolistas que portaron la “10” con Chivas.
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Alberto Medina
El famoso “Venado” hizo una mancuerna sensacional con Omar Bravo, pues solo hay un año de diferencia entre el debut de ambos. Este veloz atacante era pasador, rematador, servía por la banda, llegada por el centro, era incontenible, por ello su talento a la hora de ir al frente se traducía en diversas funciones que le permitieron portar con orgullo la camiseta 10 en algún tiempo. Jugó 410 partidos con Chivas y anotó 63 goles.
Marco Fabián
El talentoso futbolista surgido de las Chivas marcó 60 goles con la camiseta del Rebaño Sagrado, colocándose en la lista de los mejores 12 anotadores en la historia, pero su desequilibrio de tres cuartos de cancha hacia el frente lo hicieron ganarse un puesto titular con diferentes técnicos. Jugó en Chivas del 2007 al 2013 y en el 2015, donde siguió mostrando su creatividad. Su regreso no seria nada descabellado en el futuro cercano.
Ramón Ramírez
Ramón Ramírez hacía una dupla perfecta con Alberto Coyote en la media cancha, pero Ramón era quien se incorporaba con mayor frecuencia al frente por su buen disparo de media y larga distancia, además de su capacidad para desdoblar y servir con ventaja a los compañeros. Su recuerdo sigue vigente en la memoria de los chivahermanos.
Adolfo Bautista
El “Bofo” portaba el número 100 y después el 7, pero su talento era de 10, su capacidad de definición y el golpeo de balón, lo colocan en esta selecta lista de jugadores inolvidables. Con Bautista nunca se sabía lo que haría, si dispararía al arco o serviría para alguien mejor ubicado en el área. Podía meter servicios de 40 metros o anotar goles solo con un toquecito de balón.
Benjamín Galindo
La ventaja del “Maestro” es que le pegaba tan bien con las dos piernas que los defensores nunca le tomaban la medida a su privilegiado toque. Podía marcar goles desde un tiro libre o mandar servicios como con la mano, a la cabeza de un compañero. Tenía una visión perfecta de la cancha y prácticamente nunca fallaba un servicio, menos a la ofensiva.
Alberto Onofre
Los que vieron jugar a Onofre cuentan que su capacidad de tres cuartos de cancha hacia el frente no tenía comparación. Jugó con Chivas en la década de los 70 y estaba a punto de disputar el Mundial de ese año, cuando una fractura de tibia le arruinó su participación y posteriormente la carrera, porque nunca volvió a ser el mismo. Era de esos jugadores que se echaba el equipo al hombro sin temor a equivocarse y siempre seguro de lo que haría al ataque. Fue campeón con Chivas en la temporada 1969-1970.
Sabas Ponce
Nadie como Sabas Ponce para definir lo que era un creativo para Chivas. Jugó toda su carera con la camiseta rojiblanca. Tenía la capacidad de enviar servicios largos o hacer jugadas individuales para anotar o servir al compañero. Conquistó ocho títulos de Liga con los tapatíos. Obtuvo 15 campeonatos con Chivas entre Liga, Copa y Concacaf. Debutó en 1956 y se retiró en 1973, toda su carrera la jugó en la época del campeonísimo.
