El Clásico Nacional entre América y Chivas correspondiente a la Jornada 8 del Apertura 2025 llegó al descanso con un dato insólito: no se registró ni un solo remate a portería en toda la primera mitad. La expectativa era alta, pero el trámite quedó marcado por la falta de emociones y la batalla táctica en el mediocampo.

Gabriel Milito sorprendió al mandar a su equipo con una línea de cinco integrada por Miguel Gómez, Diego Campillo, Luis Romo, Miguel Tapias y Bryan González. La apuesta fue clara: cerrar espacios, ceder la pelota y esperar un contragolpe. La fórmula, en parte, funcionó. Chivas se mostró más firme en defensa que en partidos anteriores y tuvo en Campillo a su gran figura.

América y Chivas no remataron al arco en la primera mitad.

América, pese a su dominio territorial, nunca encontró claridad para lastimar. Allan Saint-Maximin comenzó con cierta electricidad ante Miguel Gómez, pero se fue diluyendo con el correr de los minutos. El equipo azulcrema terminó frustrado, sin ideas y sin tiros que preocuparan a la zaga rojiblanca.

Más allá del 0-0 parcial, lo que quedará en las estadísticas es la sequía ofensiva: un primer tiempo del Clásico Nacional sin un solo remate al arco, un hecho que refleja la dureza del duelo pero también la deuda en cuanto a espectáculo.