Carlos Salcido, legendario defensor de las Chivas de Guadalajara, es uno de los más grandes jugadores que ha pasado por el glorioso vestidor del Rebaño Sagrado, sin lugar a dudas, luego de ser el último gran capitán que portó esa cinta en la playera rojiblanca hasta 2018. Por tal motivo, hoy recordamos la ilustre trayectoria de un ídolo: "Sa, Sa" Salcido.

El portentoso central se sumó por mérito propio al nutrido acervo histórico de leyendas del Club Deportivo Guadalajara, desde la cuna, pues nació en Ocotlán (Jalisco) el 2 de abril de 1980 y tras una niñez difícil, que lo formó en la calle, todo empezó a cambiar con 17 años de edad, cuando llegó al club Oro por intermedio de su entonces entrenador: Ramón Calderón, para pasar casi de inmediato al sistema de Fuerzas Básicas de las Chivas, hasta que debutó el 22 de julio de 2001, a unos avanzados 21 años, en el empate 1-1 con Gallos Blancos de Querétaro en el Estadio Jalisco.

 

"Sa, Sa" Salcido, como se le conocía al poderoso defensor de las Chivas en el entorno del futbol mexicano, luego de su debut, regresó al Club Deportivo Tapatío y con el que comenzó a brillar en el abolido Ascenso MX, en su objetivo de volver a la Liga MX y que cumplió para el Torneo Apertura 2003. De inmediato se convierte en titular, por su polivalencia (podía jugar como central, lateral izquierdo y contención), su rapidez, buena marca y cualidades técnicas, que desarrolló con el filial, lo hizo olvidar la rudeza que exhibió en sus primeras apariciones y que eran característica de sus inicios en el futbol callejero.

Sus notables actuaciones lo llevaron de forma vertiginosa a ser inamovible en la alineación del Guadalajara y de la selección mexicana, para demostrar que nunca es tarde para iniciar una brillante carrera como profesional al avanzar más rápido que el resto, gracias a sus incursiones al ataque, ya que alguna vez fungió como delantero, por lo que recibe el llamado al Tri como defensor por izquierda. En 2005 fue el futbolista profesional con más minutos de acción en el planeta, tras jugar con Guadalajara: la Liga MX, la Copa Libertadores de América hasta la ronda de semifinales y cumplir todo el proceso de la selección, incluida la Copa Confederaciones de ese año. Lo que dejó al descubierto su increíble resistencia física y que empezó a llamar la atención en el viejo continente.

Salcido se volvió una pieza fija también en la selección mexicana hasta jugar el Mundial de Alemania 2006, en el que brilló y tras el que fue traspasado al PSV Eindhoven de los Países Bajos. El 5 de diciembre renovó su contrato hasta 2012 por 35 millones de euros y un salario anual de 3.8 millones de euros, para ser el segundo mexicano mejor pagado, detrás de Rafael Márquez (4.9 millones de euros al año). Aunque el 20 de agosto de 2010, se anuncia su pase al club Fulham de la Premier League de Inglaterra con un vínculo hasta 2013, pero tras sólo una temporada, abandonó Londres por problemas personales y volvió a México, en una cesión a Tigres UANL y en el Draft para el Apertura 2012, los felinos hacen válida la opción de compra, por los siguientes dos años hasta que finalmente regresa a Guadalajara.

El 21 de mayo de 2014 se oficializa el regreso de Carlos Salcido a las Chivas como el primer refuerzo anunciado de cara al Torneo Apertura 2014 y desde entonces, gana la Copa MX Apertura 2015 y la edición del Clausura 2017, este último en un doblete que se cristalizó el 28 de mayo, al levantar también el trofeo de la Liga MX de ese semestre. Además se coronó en la SuperCopa MX 2015-16 y elevó su quinto y último título con Guadalajara, el 25 de abril de 2018 tras imponerse en los penales a Toronto FC, para ganar la Liga de Campeones de la Concacaf 2018. El 17 de diciembre de ese mismo año, se oficializó su salida de cara al Clausura 2019, pero luego de tres Mundiales con el Tri, cinco títulos con las Chivas y una infinidad de alegrías, bajo la capitanía del inolvidable "Sa, Sa".